Los 50 de Joselito: el de Valeria, el Carnaval número 50 del 'Gancho' Buitrago
Jairo Buitrago porta aún el carnet que lo acreditaba como reportero gráfico del vespertino El Nacional.
Sentado en el separador central de la Vía 40, el único espacio que queda para una breve pausa en el trabajo de la prensa, y acosado por policías y la logística de Carnaval S.A.S. que por momentos no permiten un trabajo a la altura de las circunstancias, se le vio a Jairo Buitrago, el más veterano de los reporteros gráficos que cubrió en detalles el evento cultural más importante del país.
A sus 70 años, pero con los bríos de un juvenil periodista, el ‘Gancho’ como es más conocido Jairo, evocó en una charla informal con Zona Cero que estaba cubriendo el Carnaval número 50 en su carrera profesional.
Hizo memoria sobre ese Carnaval de 1968. Dijo, pero no le creemos, que esta este era su “último Carnaval”. Las ganas y el amor por su profesión le sobran y se mantiene vital contra viento y marea.
“Voy a hacer una exposición que llamaré ‘Mi último Carnaval’ porque el año entrante voy para palco. El año entrante compro mi palco y me voy pa’ allá arriba”, anticipó el fotógrafo mirando hacia las gradas de un palco instalado frente al Centro de Eventos y Exposiciones del Caribe.
El consagrado fotógrafo, quizás contrariado por el acoso del personal de logística y policías a su alrededor, dijo que no estará más en el pavimento “y desde allá arriba tomo mis fotos”.
La memoria le da al ‘Gancho’ hasta para hablar de su primera foto en el Carnaval de Barranquilla. Fue en 1968. Tres años antes había comenzado a trabajar como “patinador” en El Nacional. “Me mandó Jhonny Castro que fue mi primer jefe en El Nacional”, recordó Buitrago.
Para los cuatro días de ese Carnaval de 1968, su jefe le dio cinco rollos de 12 fotos cada uno. Era una cámara Yashica. “Y cuando yo estaba en la Batalla de Flores, que era por la carrera 44, el papá de Martha Luz Vásquez, (Reina de ese Carnaval), me daba otros rollos y me decía coge pelao tómale fotos a la hija mía”, afirma 50 años después Buitrago.
El papá de la Reina de ese entonces era el dueño de Foto Leo, el estudio de fotografía boom en la época. Obviamente el ‘Gancho’ recibía una “liga”.
Al vespertino El Nacional, dice Jairo, el papá lo había llevado como castigo. “Fue en un Carnaval precisamente, el de 1965. Me vine, me le escapé a mi papá de Bogotá, cogí un pasaje de Aerocondor, un Viernes de Carnaval y pobrecita mi mamá buscándome en Bogotá y yo acá más cagao. No habían llamado a mis abuelos aquí en Barranquilla y cuando lo hicieron el Lunes de Carnaval, y le dijeron que yo estaba acá… Qué piedra la que cogieron”, anota Jairo Buitrago.
Y por haberse “volado” el papá lo castigó. “Le dijo al viejo Julián Devis Echandía (Director de El Nacional), pónme a trabajar a este carajo para que vea cómo se gana uno la plata, pero zampalo en los talleres”.
El papá del ‘Gancho’ era abogado y magistrado del Tribunal Militar en Bogotá y de disciplina férrea. Por eso pidió para su hijo un trabajo en los talleres del periódico. Sin embargo, Devis Echandía fue flexible con el joven y lo puso de “patinador”. Devengaba en ese entonces 150 pesos mensuales. El periódico quedaba en la calle 44 con carrera 45.
“Yo cogía las noticias de los periodistas y se las llevaba a Devis, la chuleaba. Allí me hice llave de los fotógrafos y me llevaban a los eventos sociales". Ese carnet aún lo conserva Jairo. También conserva el carnet del Diario del Caribe.
De ese Sábado de Carnaval de 1968 en que Jhonny Castro, el jefe de fotografía de El Nacional, lo mandó a tomar fotos en la Batalla de Flores, recuerda.
La respuesta angustiada de Buitrago fue: “eche loco pero como me vas a mandar si yo no tengo experiencia de esa vaina”.
“Tello te lleva y Tello te enseña (Tello era el hermano de Jhonny Castro)”. Así llegó el neófito ‘Gancho’ a la Batalla de Flores. También recuerda que cuando ya estaba en el inicio del desfile le preguntó a su acompañante qué hacía. “¿Cómo es la vaina acá?”, insistió. “No seas marica. Tira que ahí te sale algo”.
Para satisfacción del ‘Gancho’ el papá de la reina Martha Luz le regalaba rollos para que le tomara fotos a su hija y recuerda también cómo lo apoyaron fotógrafos de la época como Manuel Guerrero. Esos rollos que le daba el papá de la Reina le servían para mejorar “las embarradas que se pudieran presentar”.
Luego de El Nacional, el ‘Gancho’ pasó a trabajar dos años después en Foto Scopell propiedad de Saúl Gómez. Más tarde al Diario del Caribe, luego El Espectador y finalmente a El Heraldo en donde se pensionó.
De esos maestros recuerda a Álvaro Cepeda Samudio en el Diario del Caribe y a Olguita Emiliani, en El Heraldo. “Mis verdaderos maestros en este arte”, remata el más veterano de los reporteros gráficos en este Carnaval de Valeria que también quedó en su lente.