Total repudio en la sociedad barranquillera causó hace tres años, el 24 de enero del 2014,  el homicidio del médico guajiro Jorge Santiago Daza Barriga a manos de sicarios, que le dispararon en siete ocasiones cuando llegaba a su casa en el barrio Ciudad Jardín.

Durante todo este tiempo su familia ha esperado paciente que la justicia actúe. El dolor de ver perder al padre, el esposo, el abuelo y el médico cada día pesa cada día.

Este martes, su viuda Cocky Páez de Daza “en nombre de toda la familia” rompió su silencio y exigió a las autoridades respuestas “claras sobre los móviles del crimen y asesinos de Jorge Daza Barriga”.

Para los familiares, el proceso de sanación “se torna muy complejo ante el silencio de las autoridades, ante la falta de respuestas por parte de las instancias correspondientes, ante la lentitud con que se ha conducido el caso”.

El día de su sepelio ante la familia y amigos que los acompañaron, Bladimiro Cuello Daza, su hermano, se lamentó no estar en el momento de su muerte: “Te pido perdón manito por no haber estado ahí para interponerme entre tú y las balas”.

Todos, desde el mismo momento del homicidio, pidieron que la muerte del neurólogo Daza Barriga no quedara impune. Incluso, una fuente de la Fiscalía dijo con certeza a este medio que “la investigación apunta hacia La Guajira” porque el mismo día del crimen, sus autores tuvieron nombre y apellido, “Marquitos Figueroa y Francisco ‘Kiko’ Gómez”, pero solo en las redes sociales y no en los estrados.

Al día siguiente del homicidio, las autoridades hallaron completamente incinerado el carro en el que presuntamente se movilizaban los asesinos de Daza Barriga, en el barrio Villa Carolina.

Unas cámaras de seguridad captaron el movimiento del vehículo y grabaron a Apolinar Betancour Ramírez, de 35 años, el soldado del Ejército que estando de vacaciones participó en el homicidio. El militar, quien debía presentarse el 20 de febrero a su unidad militar evadía desde entonces a las autoridades.

El 18 de marzo del mismo año en Riohacha, La Guajira, Betancour fue capturado y después condenado por el Juzgado Sexto Penal del Circuito con funciones de Conocimiento de Barranquilla a 23 años y 8 meses de cárcel como coautor de los delitos de homicidio agravado, con circunstancias de mayor punibilidad y fabricación, tráfico, porte o tenencia de arma de fuego, accesorios, partes o municiones agravado, con circunstancia de mayor punibilidad y uso de documento falso en concurso heterogéneo

Y  Breiner Alexander Mercado Sarmiento, de 33 años de edad, quien fue aprehendido en Las Moras de Soledad y fue el encargado de la compra del vehículo. Actualmente se encuentra con medida de aseguramiento en la cárcel de Cómbita (Boyacá), por los delitos de homicidio agravado en concurso heterogéneo con el de fabricación, tráfico y porte ilegal de armas de fuego. Este no aceptó los cargos y comparecerá a juicio oral.

En ese punto de la investigación, la familia esperaba que se esclarecieran los móviles del asesinato de Jorge Daza Barriga, pero no hubo colaboración para llegar a los autores materiales y lo que hubo fue más capturas.

El entonces vicefiscal general de la Nación, Jorge Fernando Perdomo, tras la aprehensión de alias ´Marquitos’ en Brasil negó que sobre Marcos Figueroa existiera una orden de captura por el homicidio de Daza Barriga.

Figueroa está desde el mes de abril de 2016 en Colombia después de ser extraditado por el proceso que se adelanta en su contra como presunto autor de los delitos de homicidio agravado en concurso con porte ilegal de armas de fuego y concierto para delinquir agravado. Actualmente está tras las rejas en la cárcel de Picaleña en Ibagué.

Lo que sí estaba claro para los investigadores era que cada uno de los participantes en el crimen de Daza Barriga tenía tareas criminales por cumplir, entre estas, la compra del carro, las labores de seguimiento, establecer la rutina diaria de la víctima, los lugares que frecuentaba, las clínicas que visitaba y las horas en que llegaba a su residencia.

Es decir que el homicidio fue planeado, organizado y ejecutado por delincuentes al servicio de una banda criminal, a donde no han llegado las investigaciones es al autor intelectual del hecho.

En diciembre de 2015 fueron capturados Gustavo Adolfo Jordán Noriega, alias 'Chespy', quien habría disparado al médico; Luis Miguel Venegas Castro, alias 'Luismi', encargado de seguir a la víctima en motocicleta, y Amín Contreras Hernández, alias 'Isaac', señalado de quemar el vehículo en el que se movilizaron.

El entonces director de la Policía, General Rodolfo Palomino, dijo tras presentar a los capturados “que la investigación por este asesinato no ha terminado”. 

Y transcurrido un año desde entonces y tres de la muerte del médico guajiro las investigaciones parecen haberse quedado en suspenso y no hay asomo de justicia completa, mientras su familia intenta seguir sanando sus heridas.