El gol de la victoria estaba en la banca, en las piernas de Jorge Aguirre.
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Hansel Vásquez

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Un gol de Aguirre selló una victoria que acercó a Junior con su afición

Los rojiblancos vencieron 1-0 a Patriotas y se mantienen en la punta del torneo, al lado de Nacional.

 

Con un gol de Jorge Aguirre en los estertores de las acciones, ante una magistral acción de James Sánchez, Junior se mantiene en carrera por la punta de la Liga Águila al vencer por la mínima diferencia, 1-0, a Patriotas de Tunja.

La afición respondió a los llamados de los jugadores y del entrenador, y por fin cerraron la brecha que los mantenía divorciados del equipo, con una asistencia que respondió a todas las expectativas.

Las gradas del Metropolitano nuevamente se volvieron a llenar con el colorido que le dan los aficionados, cada uno enfundado en una camiseta rojiblanca distinta que le deba un decorado impresionante al ‘coloso de la ciudadela’.

Fueron 31.268 aficionados los que citaron para tratar de subsanar ese divorcio callado entre el aficionado y el Junior. Una victoria era obligada para contentar a la ‘novia de Barranquilla’ con sus miles de amantes.

Ya en el campo, el Junior lo entregó todo con lo mejor de su nómina, entre ellos los cuatro llamados a la Selección Colombia para los microciclos, encabezados  por un recuperado Guillermo Celis que logró superar el golpe en la rodilla derecha sufrido a mitad de semana.

Pese a ello, Patriotas fue un rival que opuso resistencia en Barranquilla, dejando casi sin posibilidades ofensivas a un elenco local que se rebuscaba en los espacios, con Vladimir Hernández y Jarlan Barrera, además de los embates de los atacantes Edison Toloza y Roberto Ovelar.

Pero ante eso, los de Tunja fueron los primeros en poner en aprietos a Sebastián Viera con un disparo de media vuelta de Fabián Mena ante un cobro de pelota quieta que fue rechazado a media altura.

El disparo salió raudo a la raíz del palo derecho del cancerbero uruguayo, quien logró estirarse para atenazar el balón y quedarse con el peligro.

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La única aproximación ofensiva de los de casa llegó a los 30 cuando Roberto Ovelar sacó provecho de una gran jugada construida ente Toloza y Vladimir, para girar dentro del área y conectar de media vuelta, lo que obligó a una estirada del portero Juan Castillo.

Con el marcador empatado sin tantos, los de Alexis Mendoza se fueron al descanso con todo por ganar para la segunda mitad.

Sin embargo, el complemento no llegó como lo esperaba la afición. Por alguna razón, Junior cambió su libreto y se volvió más agresivo, e infractor, con faltas innecesarias en varias zonas del campo.

En 54 minutos, los rojiblancos vieron la baja de uno de sus hombres en el campo al ser expulsado del terreno de juego Iván Vélez por acumulación de tarjetas amarillas.

De allí en más, el partido se tornó en un peloteo insulso que complicó las cosas a un Junior que no encontró en Barrera ni Vladimir a los jugadores claros de otros compromisos. En vista de ello, Alexis Mendoza ordenó los ingresos de Jorge Aguirre, Yohnny Ramírez y Yoni González para rematar las acciones con más elementos para atacar.

Pero, a falta de las ideas en los jugadores habilidosos, cuando se jugaba el segundo minuto de adición, el volante de primera línea James Sánchez se jugó la vida recuperando una pelota en tres cuartos, tras lo que encaró y salió de la marca de un hombre para servir un pase milimétrico a Jorque Aguirre que, entrando al área, definió con un buen toque para anidar la bola en la red.

Conforme la pelota se iba al fondo, la gente iba lanzando un grito al viento. Era grito de gol, de victoria, que promete sellar la reconciliación entre una hinchada exigente y un equipo líder e invicto.  

Con el triunfo, Junior sumó 9 de 9 posibles, manteniéndose cómo colíder de las acciones con el Atlético Nacional. En la próxima jornada, los rojiblancos no verán acción tras el aplazamiento de su duelo ante Santa Fe. Mientras que jugará el sábado ante el Deportivos Pasto por la quinta jornada. 

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