Se cumplió la voluntad del ‘Campeón’: sus cenizas reposan en el Metropolitano
Fernando y Sydar Perea portaron el cofre, éste último las esparció en la gramilla.
En el mismo lugar en el que el 6 de diciembre de 1987 bajó del cielo en helicóptero, este 23 de abril del 2015 quedaron las cenizas de Édgar Perea: en el estadio Metropolitano.
Ambos hechos quedarán para siempre, una en el recuerdo de la afición, la otra en la grama del Roberto Meléndez.
Como era su deseo en vida, y en medio del coro "Perea, Perea, Perea", de parte del público, el hijo Sydar Perea regó la cenizas de su padre en el centro del campo.
"Agradecido por este recibimiento de parte de la afición", anotó el menor de los hijos del Campeón.
A él lo acompañó Fernando Perea, otro de los hijos del 'Campeón', "es una mezcla de sentimientos encontrados, pero orgulloso de haber tenido un padre como Édgar Perea, he decidido disfrutar ese orgullo que llevo en el corazón", anotó el actor.
El acto se produjo en el marco de un sobrio homenaje de Junior al periodista que lo defendió.
El alma de Édgar Perea está en el cielo, sus cenizas en el cielo y su recuerdo en el corazón de todos los junioristas.