El alguacil del condado Hillsborough (oeste de Florida, EE.UU.), Chad Chronister, confirmó en una entrevista con un canal de televisión de Tampa que el testamento del marido desaparecido de Carole Baskin, una de las protagonistas del popular documental de Netflix 'Tiger King', fue falsificado hace más de veinte años.

Esa serie documental, estrenada el pasado 20 de marzo, ha sido uno de los grandes éxitos de la plataforma durante la cuarentena provocada por el coronavirus.

La producción ahonda en la trata de felinos y otros animales exóticos en la zona del sur de Estados Unidos, específicamente sobre zoológicos de tigres en Florida y Oklahoma y en las vidas de los que los manejan y especialmente en su rivalidad.

Una de sus protagonistas es Carole Baskin, la dueña de Big Cat Rescue, en la ciudad de Tampa, que se convirtió en la propietaria de este centro de felinos en cautividad tras la misteriosa desaparición de su primer esposo, Jack Lewis, en 1997.

Dada la popularidad que generó el documental basado en hechos reales y las extrañas circunstancias de la desaparición de Lewis, que fue declarado muerto en 2002 aunque nunca se encontró su cadáver, el alguacil anunció durante el mes de marzo que reabriría la investigación.

Chronister señaló al canal 10 de Tampa que el testamento mediante el cual Baskin se hizo con la fortuna y la propiedad de Lewis fue falsificado, según ratificaron dos expertos al diario Clarion-Ledger, aunque esto era algo que la policía 'ya sabía'.

El problema es que las posibles repercusiones legales por falsificar ese documento ya han expirado.

"A pesar de ello esta situación añade otra sombra de sospecha sin lugar a dudas'" añadió Chronister.

El pasado lunes Carole Baskin obtuvo el control de un zoo de más de seis hectáreas en el condado de Garvin (Oklahoma) propiedad de 'Tiger King', también conocido como Joe Exotic, el otro gran protagonista de la serie documental de Netflix.

Joe Exotic, que se muestra en la serie como un encarnizado enemigo de Baskin, arroja sombras de duda sobre la desaparición de Lewis en la serie e incluso llega a decir que está enterrado en el centro de grandes felinos que dirige ella.

Baskin había demandado a Exotic por una disputa sobre el uso de propiedad intelectual al hacer uso del nombre y la marca del santuario para animales Big Cats Rescue. Fue condenado a pagar un millón de dólares en 2011.

Baskins demandó por segunda vez a Exotic en 2016 y lo acusó de transferir la propiedad a nombre de su madre para evitar tener que pagar a los acreedores, tras lo cual un juez federal en Oklahoma City ordenó que fuera entregada.

Actualmente, Exotic, cuyo nombre real es Joseph Maldonado-Passage, se encuentra cumpliendo una condena de veintidós años en prisión por haber intentado contratar a un sicario para asesinar a Baskin.