Para el Polo Democrático Alternativo la aprobación en el Congreso de la Ley de Orden Pública constituye un hecho histórico dentro del proceso de paz con las Farc en La Habana.

El Senador de la colectividad Senén Niño Avendaño expresó que “es un avance muy importante que se está dando y que permite augurar que el proceso de paz, que ha tenido algunas dificultades para que el 23 de marzo se haga la firma final de los acuerdos, seguramente se le va a notifica al país como, ojalá, la tregua bilateral acordada entre la guerrilla y el gobierno”.

Para el congresista, “es un signo muy positivo que todos los sectores políticos en Colombia hayan aprobado la modificación de la Ley 418 para suspender las órdenes de captura a la comandancia y bases de la guerrilla de las Farc, como haber facultado al Presidente para que establezca, previo acuerdo, la determinación de las zonas de concentración. Indudablemente que es un gran avance”.

Igualmente afirmó que todos los actores del conflicto, desde la guerrilla de las Farc, el ELN y los sectores políticos, deben participar en este proceso.

“Aquí se tiene que mirar con mucho cuidado el tema del paramilitarismo, la parapolítica, la paraeconomía y los paraempresarios para que todo esto ingrese al tema de la justicia transicional y pueda existir verdad, reparación y no repetición”, señaló.

Aseguró que el Polo democrático “ha sido un partido de oposición al modelo neoliberal, privatizador, que ha generado una tremenda crisis que hoy  están viviendo los colombianos y ha mantenido firme el compromiso de apoyo a Santos en la búsqueda de la paz”.

Senén Niño Avendaño llegó a Barranquilla para promover, conjuntamente con la presidenta del partido, Clara López, la iniciativa de “Un millón de mujeres por la paz”.

Con ella el Polo Democrático “aspira contribuirle al proceso pedagógico, de compromiso de las mujeres colombianas para que se consolide el proceso de paz que hoy se está debatiendo en La Habana, pero, además, para construir una agenda propia de reformas institucionales, políticas, económicas y sociales que permitan superar las causas que originaron la violencia en Colombia”.

Para lograr el objetivo se tienen previstas varias estrategias. “Con eventos, aplicando la fórmula del 10 x 10, 10 mujeres que se han preocupado en Barranquilla y que seguramente se van  a reflejar en más de 200 y aspiramos tener 1000 barranquilleras encabezando esta iniciativa y, por supuesto, también los hombres que estamos allí apoyando este proceso para reivindicar la mujer en su participación y en la construcción de la paz”.

El propósito es conformar rápidamente una masa crítica “para dar un impulso y ojalá pudiéramos vincular a las 24 millones de mujeres que existen en Colombia”.