¿Qué hay detrás de la propuesta del senador y expresidente Álvaro Uribe de subir el sueldo mínimo a millones de trabajadores?

Esa es la pregunta que muchos sectores en el país se hacen y que ha recibido un apoyo a medias de los empresarios, que se guardan algunas opiniones al respecto. Y por el contrario, es debatido negativamente por las centrales obreras que ven dichas facultades extraordinarios como una forma, para expedir otra serie de normas de ley en materia financiera y tributaria. 

Hay un refrán popular muy colombiano que reza: "De eso tan bueno no dan tanto", para mirar con escepticismo cualquier anuncio o promesa, viniendo de un sector que ha venido dando tumbos con los tributos a los colombianos.

La letra menuda del proyecto de Uribe bien vale la pena analizarla al detalle puesto que en tiempos en que el país está concentrado en la Consulta Anticorrupción, la desviación de la atención nacional está hoy en el proyecto que ilusiona el bolsillo de millones de hogares.

El proyecto dice en su primer artículo de aprobar las facultades extraordinarias al Presidente por el término de seis (6) meses para normas como el incremento extraordinario por una sola vez, del salario mínimo legal mensual vigente, aprobado mediante decreto 2269 de 2017. Es decir subir esos $781.242 mil mensuales.

Aumento se verá el próximo año

Los beneficiados con el aumento del mínimo hacen cuentas y de acuerdo con el trámite legislativo la subida de los salarios solo será por un par de meses en el 2018 y la ilusión de ver más dinero en el bolsillo tiene que esperar al otro año, en donde se verá el aumento puesto que sumará a la cifra del incremento por concertación o decreto en diciembre.

El proyecto establece además que el salario incrementado será la base para el futuro salario del año 2019.

Y que el aumento porcentual vaya a la base de liquidación de las prestaciones sociales y aportes a la seguridad social de los trabajadores.

El embudo

Otro interrogante que surge es si este proyecto de ley es una especie de embudo para las clases trabajadoras para lo que viene en materia tributaria. Es decir, los beneficios serán más para las empresas en rebaja de impuestos que en el aumento del porcentaje final para los salarios para millones de trabajadores.

Una pista sobre esto sería  lo que hace unos días decía el Ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla en la Asamblea de la ANDI en Cartagena donde habló de la inequidad en la tributación, donde se gravaba más al rico que al pobre, y expresó la famosa frase del "Sisben para los ricos"; mencionando además que Colombia es uno de los países con mayor tributación en el mundo.

Otro aspecto que acompaña las propuestas planteadas por Álvaro Uribe, y que termina por generar temor, es la historia que se cierne sobre sus hombros cuando era Presidente y sancionó la  Ley 789 de 2002. Fueron muchos los colombianos que dejaron de recibir recargo nocturno, horas extras y dominicales con el recargo del 100 por ciento sobre el salario ordinario.  Dieciséis años después, el expresidente sigue defendiendo el tema.

Las reacciones

Uno de los reaccionar y en contra fue el senador barranquillero Armando Benedetti. "Es mentira que le van a subir el salario mínimo a los colombianos. El proyecto le daría facultades al Presidente para hacerlo una única vez, como una estrategia para distraernos de los nuevos impuestos que le quieren clavar a la clase media y baja", dijo en su cuenta de Twitter.

Para la senadora de la FARC Victoria Sandino, "el Proyecto de Ley radicado por el Senador Álvaro Uribe solo busca darle facultades al presidente Ivan Duque para definir arbitrariamente un posible incremento desconociendo el mandato constitucional de concertar con los trabajadores y trabajadoras".
 
El exministro Guillermo Rivera  indicó que en la exposición de motivos, el expresidente Uribe sostiene “queremos una economía cristiana”..."¿En donde queda el Estado Laico establecido en nuestra Constitución? , ¿En ese tipo de economías no caben los no cristianos y los ateos?".

El politólogo Luis Ernesto Gómez, también, se pronunció en su cuenta de Twitter y le dio la bienvenida al aumento del salario mínimo: "con mayores ingresos en los hogares pobres, aumenta el consumo y crece la economía. Para eso no necesitan el show de un proyecto de ley pues en diciembre tendrá el gobierno las facultades. El mismo tiempo que dura el trámite de la ley".