En un contexto de creciente escrutinio público hacia los candidatos presidenciales, el abogado y precandidato Abelardo De La Espriella se refirió a un video que ha estado circulando en redes sociales y medios, donde entrega unas declaraciones "hablando bien" del entonces alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, hace 12 años. 

De La Espriella, en diálogo con Zona Cero, ofreció una detallada aclaración sobre las circunstancias de dicho material audiovisual, desvirtuando cualquier implicación de afinidad política con el actual Presidente.

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El precandidato aseguró que el video corresponde a una etapa de su vida profesional en la que ejercía activamente como abogado litigante, una profesión que desempeñó durante 22 años. "Yo fui abogado, porque la gente se le olvida que yo he sido abogado, fui abogado por 22 años y litigante, defensor", precisó.

Explicó que en ese momento defendía los intereses de Carlos Gutiérrez Robayo, concuñado de Gustavo Petro (la esposa de Gutiérrez Robayo y la esposa de Petro son hermanas). Según De La Espriella, Gutiérrez Robayo "estaba siendo acusado periodísticamente de tener contratos irregulares al interior del Distrito de Bogotá", en un contexto en el que se hablaba de un "segundo cartel de la contratación" tras el escándalo de Samuel Moreno.

"Él llega a mi oficina en ese momento, ya estaba distanciado de Gustavo Petro y lo estaban acusando de tener unos contratos al interior del Distrito. Algunos periodistas lo estaban acusando en un informe y básicamente alguno de esos informes señalaba que había un segundo cartel de la contratación, (antes de Petro estaba Samuel Moreno)", detalló De la Espriella.

En defensa pública de su cliente, el abogado argumentó que "quien había denunciado el cartel de la contratación había sido Gustavo Petro y que Petro no era ni Samuel Moreno y que mi cliente no era Emilio Tapia". De La Espriella subrayó que, al final, la situación se resolvió a favor de su cliente, ya que "efectivamente no había nada".

El precandidato fue enfático en aclarar que su intervención no buscaba defender a Gustavo Petro directamente, sino a su cliente, Carlos Gutiérrez Robayo. Además, argumentó que su actuar se enmarcaba en la ética profesional de un abogado, que "no acusa sin pruebas".

Abelardo de la Espriella decía en 2013 que @petrogustavo era un hombre honesto, que desenmascaraba mafias y enfrentaba poderes oscuros. Hoy lo ataca con furia desbordada porque este gobierno ha tocado sectores muy poderosos que seguramente le afectan sus intereses.

La verdad no… pic.twitter.com/4qkRmcc2k7

— Kevin Gómez Paz (@ckevingomez) July 30, 2025

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"Yo no soy como la gente de la izquierda, yo no soy capaz de salir a acusar a una persona de lo que no es. Hace 13 años no se sabía que Petro era un corrupto, que era un drogadicto, que era un loco, esa es la verdad", afirmó.

Abelardo De La Espriella destacó que, en ese momento, Petro no tenía las sindicaciones públicas que hoy son de conocimiento general. Hizo un paralelo con figuras políticas de izquierda a quienes considera "hombres serios y honestos" en la actualidad, a pesar de sus diferencias ideológicas, como Jorge Enrique Robledo, señalando que no los acusaría de algo si no existieran pruebas.

Finalmente, el precandidato se desmarcó de cualquier asociación con el petrismo, reiterando su historial de votación en contra de Gustavo Petro en todas las elecciones en las que ha participado.

"Yo primero, nunca he estado con Petro, ni voté por él nunca. Cuando él se lanza a la alcaldía de Bogotá, yo voté por Enrique Peñalosa... cuando se lanza la primera vez a la Presidencia fue con el presidente Uribe, obvio voté por el Presidente Uribe; cuando se lanza la segunda vez fue con Duque, obvio voté con Duque y la tercera voté primero por Fico y después por Rodolfo", sentenció.

De la Espriella concluyó que la difusión de este video es un intento desesperado de la "izquierda y gente de este lado que ve en mí un peligro porque me estoy trepando en los números y me ha ido súper bien con el lanzamiento de mi candidatura".

Calificó el intento de vincularlo con el petrismo como "chingo" y un "acto desesperado", asegurando que "conmigo la pelea es a otro precio".