La familia de María De la Cruz Otálora Pérez está indignada por su atroz crimen. Exigen a las autoridades la pronta captura de Robin Ballestas, el compañero sentimental de ella y quien es el principal sospechoso de su muerte.

Precisamente la Fiscalía emitió en la mañana de este viernes una orden de captura contra él para que responda por el hecho.

Varios de los familiares de la mujer llegaron en la mañana de este viernes a Medicina Legal para iniciar los trámites de entrega del cuerpo. Marberlys García, nuera de la mujer, reveló nuevos detalles del caso.

“Al hijo le hicieron una llamada anónima diciéndole que no la buscaran en la calle, sino que cavaran en el patio. Él empezó a buscar con una pala, pero no la encontró. De nuevo volvieron a llamarlo y le dijeron que siguiera buscando. Ayer el hijo siguió cavando y la encontró. Tenía la lengua afuera, lo que hace presumir es que la ahorcó”, dijo la nuera.

La mujer tenía 4 años de estar conviviendo con Robin y según indicó su familia en reiteradas ocasiones ella había sido víctima de violencia intrafamiliar por parte de él.

“Una vez la golpeó con una varilla. Se le decía que lo dejara, pero no hizo caso”, dijo la nuera.

El hombre siempre les decía a los hijos de la mujer que ella se había ido a trabajar a Santa Marta, pero ninguno le creía. Robin permaneció en la vivienda 24 días después de la desaparición de la mujer, que fue el 31 de diciembre, fecha en la que se presume que fue asesinada. El 25 de enero cogió su ropa y se marchó.

La familia está a la espera que pronto sea capturado para que responda por este atroz crimen.

Casos similares

El 27 de agosto del 2015 fue encontrado enterrado en la sala de una pequeña vivienda el cuerpo de Luis Gabriel Mora Rueda, quien se encontraba desaparecido  desde el 2 de ese mismo mes.

Su cuerpo logró ser hallado cuando un familiar abrió la puerta del inmueble y al notar un olor desagradable empezó a buscar de dónde provenía. Notó que una parte del piso estaba levantado y recién arreglado. Con una pala empezó a cavar y fue allí cuando encontraron el cuerpo.

Una hipótesis que se manejó en su momento las autoridades es que probablemente al hombre lo hayan matado y enterrado para tratar de robarle 10 millones de pesos que tenía en un banco.

Por ese caso aún las autoridades no han reportado capturas.

Otro hecho macabro muy similar se presentó en el patio de una vivienda del corregimiento de Campeche, en Baranoa, en noviembre del 2012, cuando miembros del CTI hallaron enterrado el cuerpo del comerciante Alfredo Pombo Padilla, de 50.

El crimen quedó resuelto cuando su pareja, de 23 años, confesó haberlo envenenado y lo enterró en una fosa que hizo en el patio de la casa.