El asesinato de Fabián Eugenio Pérez Hooker, llamado el ‘Rey del Creole’, uno de los artistas más reconocidos y connotados en San Andrés, fue atribuido por la Fiscalía a un acto de intolerancia en el que él no era el objetivo de los asesinos.

Pérez Hooker, conocido como Hety, quien hacía parte del dúo Hety and Zambo, recibió varios impactos de bala el 13 de marzo cuando hablaba con dos personas en la puerta de una casa en la isla.

Al día siguiente murió por la gravedad de las heridas.

La investigación de la Fiscalía permitió establecer que el objetivo del ataque era Hillbor Allen Pusey Rodríguez, amigo de Hety, quien se encontraba en el sitio junto a Minerva Venecia y Hooker James. Los tres resultaron heridos.

El fiscal general, Francisco Barbosa, señaló que por los hechos fue judicializado Dixon Denzel Manuel Watson, alias Pago.

Esos disparos iban contra mí, Hety no tiene nada que ver con esa banda ni con mi familia, ellos llegaron, dispararon indiscriminadamente, relató el amigo de la víctima.

“Pruebas testimoniales, reconocimientos fotográficos e inspecciones técnicas al lugar de los hechos permitieron identificar a alias ‘Pago’, como la persona que, al parecer, manejaba la motocicleta desde la cual se realizó el ataque contra Hety y sus amigos”, dijo el jefe del ente acusador.

De acuerdo con la investigación, las tres personas se encontraban en el sector de Mission Hill, cuando pasó una motocicleta de color negro en la que se movilizaban ‘Pago’ y Joshua Smith Vargas.

Este último le habría avisado a ‘Pago’ que vio en el lugar a Pusey Rodríguez.

Continuaron su marcha y poco rato después regresó la motocicleta conducida por ‘Pago’, pero esta vez el parrillero era Joseph David Cadena, señalado por la Fiscalía de disparar contra Rodríguez y sus acompañantes.

El fiscal del caso señaló que al parecer fue consecuencia de un acto de intolerancia y por riñas entre personas que vivían en el barrio La Zona.

“Hubo un acuerdo previo para el crimen, el capturado sabía lo que estaba haciendo”, dijo el investigador, y precisó que la víctima estaba en estado de indefensión cuando se produjo el ataque.

“Todos saben lo que pasa en La Zona, hay un problema que viene hace más de siete años entre mi familia y una banda”, dijo Hety.

Personas cercanas a la víctima señalaron a los investigadores que el cantante nunca había recibido amenazas, y que era amigo del colegio, hace 15 años, de Pusey (el objetivo de los asesinos), quien entregó a la Fiscalía su versión de lo sucedido.

De acuerdo con el relato, reconoció a las personas que hicieron los disparos y dijo que ellas trabajaban con alias ‘Ñoño’ y hacían parte de una banda.

El fiscal del caso pidió que el procesado, que no aceptó los cargos, fuera enviado a una cárcel por el riesgo que representaba para la sociedad y por la gravedad de los hechos que dijo, quedó evidenciado en el rechazo que generó en las comunidades de las islas.

La juez envió al capturado al centro carcelario de la isla, Nueva Esperanza.