Toda un novela, planeada por una mente criminal. Así es el caso de la jueza municipal de Ataco, Tolima, señalada de orquestar un plan para atentar contra la vida de su hijastra y contra  la actual compañera sentimental de su exmarido, en Cali e Ibagué, respectivamente.

La funcionaria judicial, identificada como Lilia Alberta Ospina Fuentes, fue capturada por la Sijn de la Metropolitana de Ibagué; al igual que su madre María Alberta Fuentes y su tío, el taxista José Ismael Ortegón Caicedo, alias ‘José José’. Este jueves un juez los envió a los tres a la cárcel por tentativa de homicidio y porte ilegal de armas de fuego. 

El caso se remonta al 20 de marzo de este año, cuando una de las víctimas, Mirna Yicela Torres Sáenz, se trasladaba a su casa en su carro con una amiga y fue interceptada por dos hombres que le dispararon desde una moto Pulsar. Por fortuna, la rápida reacción permitió a la mujer ser llevada a un centro asistencial para su atención. A la víctima le llamó la atención que el sicario la miró fijamente por varios segundos antes de dispararle, para percatarse de que fuera ella.

Los dos sicarios, José Raúl Vélez, alias 'Parce' y Juan David López Orozco, alias 'manizales',  fueron capturados por la Policía y sus teléfonos revelaron el plan criminal, en el que estaba involucrada la funcionaria judicial. 

Los dos capturados, también, estaban contratados para atentar contra la vida de María Luisa Páez Arias, de 29 años, hija del expareja de la jueza, Leonardo Páez, a quien la mujer le llamaba despectivamente la "cucaracha", y a la que hicieron seguimiento durante 4 días en Cali infructuosamente.

Según publicó el periódico El Nuevo Día, en las audiencias, la fiscal del caso reveló que la Jueza Lilia Alberta Ospina Fuentes y su madre "fraguaron el plan criminal, contrataron a los  sicarios e hicieron pagos a través de las empresas de giros".

"Ospina Fuentes fue quien consiguió las armas, su mamá las llevó desde Ataco hasta Ibagué, donde las entregó al taxista. Por último, ‘José José’, a borde del taxi que manejaba, les entregó las armas a alias ‘Parce’ y ‘Manizales’ muy cerca de la estación de gasolina donde trabajaba Mirna Yicela", se lee en el informe del diario tolimense.

El motivo, indicó la Fiscal del caso, fue el final de la relación con Páez hace dos años.  Uno de los sicarios capturados en el hecho murió en extrañas circunstancias el pasado 26 de junio en una cárcel en Ibagué.