El caso del hombre encontrado muerto, empalado y con graves heridas causadas con machete, tiene todos los ribetes de una película de terror.

Tras conocerse el homicidio, luego de que un reciclador que hurgaba entre las bolsas de basuras en la calle 41 con carrera 53, Barrio Abajo, en la mañana de este domingo 5 de febrero, se pensó que podría tratarse de una vendetta por narcotráfico.

Es usual que como por efecto dominó, luego de un decomiso de drogas, aparecen personas asesinadas en la forma más cruel que se ha imaginado la humanidad. Y en estos días las autoridades han propinado golpes a los narcotraficantes.

Por ello se se pensó que este sería el primero de una serie.

El hombre fue encontrado con un palo de escoba en el recto, cortes de navaja de las comisuras de la boca hasta las orejas, degollado, y un corte en la cabeza y tórax producidas con un machete. Estaba metido en un saco.

Pero no fue tal

Luego de pesquisas de la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía con el apoyo del CTI y de la publicación de la foto de la cabeza del asesinado, se logró establecer que el occiso era una persona enferma por las drogas, que residía con su mamá, en la calle 42 entre carreras 45 y 46, frente a una institución educativa. Lo identificaron, hasta ahora, solo con su nombre: Marlon. Tanto la compañera sentimental como las personas que lo conocieron ignoran su apellido. El Instituto de Medicina Legal, a través de la tarjeta dk dactilar, lo está tratando de identificar plenamente.

De acuerdo con indagado y recopilado por Zona Cero, los primeros informes indican que los dos sospechosos de haber cometido el homicidio serían dos menores de edad, al parecer drogadictos. Uno de ellos sería el hijo de la compañera sentimental del hoy occiso, a quien también vinculan a esta muerte cruel, y a un amante de ésta.

¿Los móviles? Todo fue cometido por personas enfermas por las drogas, pero no se ha establecido con precisión lo que habría generado el horrendo crimen.

De acuerdo con lo conocido por Zona Cero, todo comenzó con un reclamo de la compañera sentimental al hoy occiso. Este habría reaccionado con vehemencia, y el amante le reviró con un machetazo en la cabeza, apoyado por los menores, con los resultados horrendos.

"Esos tipos son unos sádicos", dijo uno de los investigadores que conoció el caso.