Un colombiano entre los tres finalistas del premio Martin Ennals de Derechos Humanos
Marino Córdoba fue nominado por su labor con las víctimas.
El activista afrocolombiano Marino Córdoba Berrío fue seleccionado como uno de los tres finalistas al premio Ennals de derechos humanos.
El Premio Ennals es concedido de común acuerdo por diez organizaciones defensoras de los derechos humanos de reconocimiento internacional, entre las que se encuentran Amnistía Internacional, Human Rights Watch, y la Organización Internacional contra la Tortura, y es considerado uno de los más importantes en su categoría.
"Córdoba ha sido un líder comunitario desde 1991 que consiguió el reconocimiento legal de las tierras de su comunidad, tras lo cual muchos de sus miembros fueron expulsados. Durante años ha luchado para denunciar esa situación", explicó en rueda de prensa el director de la Fundación Martin Ennals, Michael Khambatta.
"La alegría que tenemos es inmensa por estar nominado a este valioso premio", explicó a Efe Córdoba en conversación telefónica desde Bogotá.
"Porque es un reconocimiento no solo para mi como persona, sino para el país, y para la lucha de los defensores de derechos humanos que en este momento estamos siendo perseguidos, amenazados, asesinados, y esto manda un mensaje importante al país y al mundo de que la comunidad internacional está atenta y observando lo que pasa en Colombia, y da respaldo a la lucha de los derechos humanos", añadió.
Khambatta destacó, asimismo, el papel de Córdoba en la inclusión del capítulo étnico en el acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC.
"Tras años exiliado en Estados Unidos consiguió que las comunidades indígenas y los afrocolombianos fueran reconocidos formalmente como parte del acuerdo de paz a través del capítulo étnico, que llegó a estar en riesgo, y gracias a sus esfuerzos fue finalmente incluido", agregó Khambatta.
"Nosotros fuimos un tercer actor en la mesa. Negociamos con las dos partes lo que se conoce como el capítulo étnico. Esto tiene un significado muy importante, primero la unidad, y luego logramos sacar un acuerdo que permite un reconocimiento de la marginación y la exclusión de los afrocolombianos y los indígenas, y como fuimos afectados por el conflicto", explicó el defensor.
Córdoba puntualizó que el capítulo étnico es transversal por lo que los derechos de los indígenas y afrocolombianos tendrán que ser tenidos en cuenta en todos los aspectos de la implementación del acuerdo de paz.
Junto a Córdoba han sido nominados como finalistas la abogada y activista de derechos humanos turca Eren Keshin y el sudanés Abdul Aziz Muhamat.
Keshin ha abogado durante treinta años por los derechos de los kurdos, las mujeres y la comunidad LGTBI (Lesbianas, Gais, Transexuales, Bisexuales e Intersexuales) y este año fue condenada a 12,5 años de prisión por supuestamente haber degradado la nación turca y haber insultado al presidente de Turquía.
Muhamat, por su parte, es un activista por los derechos de los refugiados que está retenido en el centro de detención para inmigrantes australiano en la isla de Manus, en Papúa Nueva Guinea.
El ganador del galardón de este año será conocido el 13 de febrero de 2019.
EFE