Un reciente procedimiento de inspección y vigilancia llevado a cabo por las Delegaturas para EPS, para Prestadores de Servicios de Salud, y para Gestores Farmacéuticos de la Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud), reveló serias deficiencias en el seguimiento y la entrega oportuna de medicamentos a pacientes con enfermedades crónicas.

De acuerdo con la auditoría, se encontró material probatorio suficiente que evidencia la falta de seguimiento por parte de una EPS, en este caso Famisanar y de un gestor farmacéutico (Colsubsidio), en la entrega completa de tratamientos para usuarios con patologías crónicas, como el caso de Ana María Cuesta, usuaria de Famisanar y quien falleció el pasado 11 de junio.

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Por otro lado, la Supersalud determinó que la IPS involucrada actuó conforme a los protocolos de atención y de manera oportuna, verificando un proceso adecuado en su parte. Sin embargo, se detectaron dificultades significativas en la comunicación entre el gestor farmacéutico y la EPS para el seguimiento y la resolución efectiva de los medicamentos pendientes para estos pacientes.

A raíz de estos hallazgos, la Superintendencia informó que decidió  trasladar el caso a la Delegatura de Investigaciones Administrativas de la Supersalud.

Esta instancia será la encargada de iniciar una investigación formal, garantizar el debido proceso y, en última instancia, dictar las acciones de control que considere pertinentes para sancionar las responsabilidades y asegurar que situaciones similares no se repitan