Un hecho insólito se registró durante una fiesta de quinceañero que se celebraba en un salón de eventos próximo al Cementerio Central de Soledad.

Para el festejo, y como se ha vuelto usual, los padres de la cumplimentada, que se mantienen en el anonimato, organizaron la fiesta con una “lluvia de sobres”, que no es más que la entrega de un sobrecito con un aporte en dinero, de acuerdo con la condición económica del invitado.

Generalmente, para estos casos se dispone de una especie de urna, en la cual los invitados van depositando los respectivos sobrecitos con el dinero.

En el caso de Soledad todo marchaba bien hasta que hacia la medianoche del sábado 29 de septiembre una mujer llegó al sitio para recoger a una sobrina que participaba en la fiesta.

De manera simultánea, a esa misma hora la quinceañera fue invitada para que tocara el acordeón, por lo cual todos los participantes, en su mayoría del interior del país, se congregaron alrededor de ella para ver su interpretación.

 Por este hecho la urna con los sobres quedó desprotegida, situación que fue aprovechada por la mujer para sustraer los sobres.

Esta acción fue advertida por uno de los invitados, que observó cuando la mujer cogía los sobres.

De inmediato hubo un airado reclamo, originándose una trifulca. La mujer alcanzó a devolver unos sobre, pero quedaron faltando otros, por lo que se presume que la mujer actuó en complicidad de otra persona.

El hecho fue denunciado ante las autoridades competentes, mientras avanza la investigación por este hurto estimado en 2,5 millones de pesos.