“No hubo secuestro en caso de funcionario de Coljuegos en Baranoa”: Policía
La Policía de Atlántico se pronunció por la polémica desatada cuando un funcionario de Coljuegos llegó a un establecimiento de maquinitas.
Frente a los hechos acontecidos el pasado viernes en un local comercial del municipio de Baranoa, en donde un funcionario de Coljuegos denunció haber sido retenido por parte del administrador del lugar donde funciona máquinas tragamonedas, La Policía de Atlántico se pronunció.
“Unidades del Modelo de Vigilancia Comunitaria por Cuadrante y del grupo Acción Unificada por la Libertad Personal (GAULA), en compañía con el Ministerio Público (Personaría), asisten a requerimiento ciudadano de un funcionario de Coljuegos y un propietario de establecimiento abierto al público de razón social "El Caney. En dicho procedimiento se estableció que no se materializó el delito de secuestro en ninguna de sus modalidades”, dijo el coronel Carlos Currea Barrera, comandante de la Policía de Atlántico.
El oficial precisó que se garantizaron los derechos de las partes implicadas.
“El Departamento de Policía Atlántico ha puesto a disposición de los implicados la Oficina de Atención al Ciudadano para que interpongan la respectiva queja en caso de considerar alguna anomalía en el procedimiento”, indicó el Comandante.
El funcionario de Coljuegos, Eduardo Casallas, y su coordinador Mario Escalante, precisaron el día anterior que sí hubo irregularidades frente al requerimiento de la Policía teniendo en cuenta que le estaba dando la razón era al administrador del lugar, que al parecer funciona de manera ilegal.
"Solicitamos el apoyo de la Policía, pero los policías de la estación de Baranoa estaban apoyando al dueño del establecimiento", expresó el coordinador Escalante, el día anterior.
Los funcionarios de Coljuegos llamaron al Gaula de la Policía del Atlántico y este indicó "no era un secuestro extorsivo, sino un secuestro simple".
"Dijo que no era competencia de ellos", expresó el coordinador.
Escalante aseguró que este lunes radicará una denuncia formal por secuestro simple contra el administrador del local y colocará una queda en la Procuraduría por el supuesto actuar de los policías que llegaron a atender el caso.