Luego de dos años consecutivos de contracción en el número de unidades inmobiliarias vendidas en la ciudad de Barranquilla y su Área Metropolitana, en el 2019 la ciudad logró cerrar con un registro de 17.343 inmuebles vendidos. 

En este indicador generado por la Lonja de Propiedad Raíz de Barranquilla, solo se tienen en cuenta las transacciones efectivamente escrituradas y registradas.

Se presentó un incremento del 11% en el número de transacciones de ventas inmobiliarias respecto al año 2019, situándonos en unos niveles de venta que no se alcanzaban desde hace aproximadamente 3 años. 

Este es el termómetro que refleja el fortalecimiento de la dinámica económica local, y el mejoramiento en el desempeño de la comercialización de unidades nuevas y usadas.

Respecto a la venta de unidades nuevas, se ha incrementado la rotación de inventarios de proyectos de construcción que han logrado finalizar obras y efectuar las entregas materiales y escrituración de los inmuebles. 

Por su parte, las unidades usadas siguen consolidando su atractivo gracias a que cuentan con valores por metro cuadrado más competitivos y ubicaciones en áreas consolidadas urbanísticamente.

Por otro lado, también se incrementó en un 18% el valor consolidado de las transacciones registradas en Barranquilla respecto al año inmediatamente anterior, alcanzando la cifra histórica de 3.9 billones de pesos. 

La tendencia de este indicador siempre ha sido positiva durante los últimos años en la ciudad y, sin duda, refleja en gran medida la obligatoriedad de escrituración de los inmuebles sobre el valor final de venta, situación que fue reglamentada en la fallida ley de financiamiento pero luego refrendada en la recién implementada Ley de crecimiento (reforma tributaria nacional).

Finalmente, se destaca que el valor promedio de las unidades vendidas en Barranquilla durante el 2019 fue de 228 millones de pesos, lo que refleja claramente que los estratos 3, 4 y 5 son los que mayor dinámica presentan. 

En los últimos 4 años se ha presentado una tendencia positiva al alza respecto al valor promedio de las propiedades vendidas. Se ha incrementado en más del 60% desde el año 2016, pasando de 141 millones a los 228 millones promedio con el que cerró la ciudad en 2019.

Esto refrenda la importancia del negocio inmobiliario en la dinámica económica de la ciudad ya que es transversal a todos los subsectores productivos. La inversión en finca raíz continúa siendo uno de los esquemas de inversión de capital más seguros y rentables, por lo que se recomienda siempre contar con la asesoría de empresas inmobiliarias expertas en este tipo de transacciones.