Los resultados que recientemente presenta el Dane, en cuanto a los 50 millones y un poquito más de colombianos que hoy residimos en el país, han provocado el pronunciamiento del Departamento Nacional de Planeación y del Ministerio de Hacienda, que a través de medidas transitorias, buscan de momento, mitigar los impactos en el recalculo de los recursos del SGP –Sistema General de Participaciones – asignados a los entes territoriales (Departamentos, Distritos y Municipios) toda vez que la estructura poblacional de los territorios, es uno de los criterios tenidos en cuenta a la hora de la distribución  de estos dineros públicos. Ver este enlace.

Y es que el Censo Nacional de Población y Vivienda 2018, no solamente ha puesto de manifiesto datos disparejos frente a las proyecciones poblacionales que se elaboraron con base al Censo del 2005 y que arrojaban una cifra mayor de colombianos para el 2020. (Ver Gráfica 1) 

Ver este enlace.

Para el DNP el tema implica además, el análisis de una nueva realidad de las Necesidades Básicas Insatisfechas - NBI – medidas también por el DANE, que pone de presente una reducción sustancial en este indicador social del País, que paso de 27,7% en el 2005 a 14,3% en el 2018, este fenómeno a la vez se presentó en el Departamento del Atlántico y en muchos de sus municipios. (Ver Grafica 2)

Ciertamente el DNP intenta resolver de forma equilibrada los efectos de la  nueva radiografía poblacional y de Necesidades Básicas Insatisfechas en cuanto a la distribución de los recursos del SGP de la Nación, lo que de momento no está claro son las afectaciones de estas mismas 2 variables en el esquema de repartición del Fondo de Compensación Regional y del Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación del Sistema General de Regalías, del que participan también los Departamentos, Distritos y Municipios.

Para el Departamento del Atlántico y buena parte de los municipios que han experimentado una disminución en sus NBI,  el actual marco legal y normativo,  regido por la ley 1530 del 2012 o Ley del Sistema General de Regalías y sus Decretos reglamentarios, representan un punto de cuidado y atención, toda vez que las actuales reglas de juego  plantean unas NBI mínimas de 30% para ser beneficiario de varios de los fondos de las regalías, porcentaje del que el Atlántico y 19 de sus municipios ya se encuentran bastante alejados.  Ver este enlace.

Algunos datos no menores que nos muestra el CENSO 2018, están asociados precisamente a los resultados de decrecimiento que según el DANE presentaron varios municipios del Atlántico, frente  a las proyecciones construidas por ellos mismos, a partir del Censo de 2005, lo cual se convierte en un factor de amenaza para las nuevas asignaciones de recursos económicos de estos entes territoriales; quedan en todo caso enormes dudas en razón a los casos de Baranoa, Malambo, Sabanalarga y Soledad. (Ver Grafica 3)

Preocupa de sobremanera la suerte que puedan correr las finanzas del Departamento del Atlántico y la mayoría de sus municipios, respecto a la asignación de los dineros del Sistema General de Regalías (SGR), puesto que a la luz de la legislación vigente, que establece un índice de NBI por el orden del 30% para los Departamentos y 35 % para los municipios, no podrían acceder a los recursos del Fondo de Compensación Regional (como es el caso actual de Soledad) al tiempo que se  disminuirían los montos de los Fondos de Desarrollo Regional, Ciencia, Tecnología e Innovación. La tabla 1 nos muestra las asignaciones del SGR proyectadas para el Departamento del Atlántico en los próximos años, sustentadas en los datos del Censo 2005 y que muy probablemente sufrirán variaciones negativas con base a las estadísticas del Censo 2018.

Por Ing. Leonardo Pereira G.
Mag. En Administración Pública y Esp. en Gerencia de proyectos.
Twitter: @leopereira33