Maiknor Reid, el ‘Cuadrado’ dentro del rectángulo del baloncesto bolivariano
Es uno de los jugadores estelares de la selección Colombia de baloncesto que busca el oro de los Bolivarianos.
Colombia dominaba a sus anchas por todo el rectángulo y la gran pelota naranja rebotaba de mano en mano entre los locales. Bolivia lucía desconcertada, era la altura del tercer cuarto y sistemáticamente el equipo nacional había desbaratado y defendido cada ataque del equipo verde.
Sin embargo, un error en una sencilla asistencia desencadenó una salida trepidante de lo bolivianos en contraataque, parecía que una cesta era imposible de evitar. Pero justo cuando el atacante se preparaba para clavar la pelota en las redes, desde atrás como un suspiro apareció la mano salvadora del número ‘4’ del equipo colombiano que con un tapón asombroso evitó la anotación de su rival.
La acción desató la histeria del coliseo samario, gente de pie y aplausos a montón entre los aficionados, pero luego, cuando la salva de aplausos terminaba, hubo una milésima de segundo cargada de silencio, el suficiente tiempo para que un espontáneo se levantara y gritara: “¡buena, Cuadrado!”, que retumbó con feroz jocosidad por todo el escenario.
El coro de los demás no se hizo esperar, y en la siguiente posesión ya era ‘vox populi’ en el coliseo: “¡Cua-dra-do, Cua-dra-do, Cua-dra-do!”, gritaban todos al unísono. Pero lo curioso de todo esto es que el jugador no tiene como apellido el de Cuadrado, ni mucho menos.
Es un sanandresano de 19 años de edad, alero de una universidad en Medellín que lo becó hace tres años por su gran talento en el baloncesto, y que alterna la vida debajo de los tableros con sus estudios de negocios y finanzas internacionales. Su nombre, tan particular como su aspecto, es Maiknor Reid y parece una copia al carbón del jugador de fútbol de la Selección Colombia, Juan Guillermo Cuadrado.
Si se tratara de hacer parangones, lo primero en dejar claro es que lo que hace con los pies el futbolista, lo hace el basquetbolista con las manos y que su gran parecido radica en la particularidad de su peinado.
“Lo escogí porque los jugadores de la NBA que admiro lo usan y por eso comencé a hacerlo. La gente siempre dice ‘Cuadrado’, no es algo que me moleste. Se han llegado a confundir y a pedirme fotos por la calle pensando que soy él”, comentó algo risueño luego de liderar la victoria 85-47 ante Bolivia en el debut de Colombia en el torneo bolivariano de baloncesto.
Todo empezó hace tres años aproximadamente, cuando el entrenador Alfredo Valdemarar lo seleccionó en una convocatoria sub-17 en La Guajira. Desde allí nunca más salió de la lista de jugadores nacionales y hoy en día es un referente del equipo y del estilo que intenta reflejar el entrenador.
“Gracias a Dios hicimos lo que propuso el ‘profe’ y logramos la victoria. Aspiramos a ganar todos los partidos y conseguir el oro. Principalmente juego de ‘dos’ y a veces ayudo a la presión y a bajar la pelota”, señala sobre las intenciones del entrenador con él durante las competencias.
Reid se desplaza sobre el maderamen con soltura y ligereza. Nunca pide ser relevado y aporta la intensidad que requiere un equipo presionante como lo es Colombia. Además, su apariencia y estilo de jugar hace que la tribuna genere una conexión única con él cada vez que pivotea el balón por el rectángulo de juego.
“Maiknor físicamente es un jugador muy bien dotado, te puede correr los 40 minutos. Ahora mismo él se convierte en un referente y es un jugador al que hay que tratar de apoyar al máximo, como a todos”, comentó el entrenador Valdemarar.
Entre tanto, este lunes cuando se midan ante Perú, Maiknor seguirá defendiendo los colores de su país en procura del oro bolivariano y levantando las tribunas con su juego alegre y despliegue físico, el mismo que ya lo tiene soñando con dar el salto al profesional y con el sueño de “todo jugador de baloncesto, la NBA”.