Ruby Palacios, con la misma talla de sus hijos boxeadores, quienes pelean en y superwelter y  semipesados,  se movía por toda la casa ubicada en Villa Estadio y  esquivaba los golpes que le lanzaba el francés Mathieu Bauderlique en Brasil.

Ruby  no pudo terminar de ver el combate en el que el menor de sus hijos, Juan Carlos Carrillo, se jugaba el paso a cuartos de final de Río de Janeiro 2016. El nerviosismo le pudo más y se paró del frente del televisor.

"Le doy gracias a Dios que pudo llegar a dónde está. Estoy feliz por lo que hizo mi hijo", anotó la  madre del boxeador barranquillero Juan Carlos Carrillo, quien quedó eliminado de los Juegos Olímpicos al perder por decisión unánime este miércoles.

Su hermano Leonard Carrillo, también pugilista pero ya profesional, lamenta que el  sueño de podio haya terminado. "Se siente bastante tristeza porque es mi hermano y quería que se ganara una medalla olímpica".

Por su parte Juan Carlos Carrillo padre vio el combate con mesura y entregó un concepto más objetivo de la pelea. “Lo vi desconcentrado, sin distancia. No era la pelea de él. Tenía que pelear moviéndose".

Aunque se quedó a puertas de los cuartos de final,  Juan Carlos sigue siendo el orgullo de sus familiares, "mi hermano mostró que tiene más talento y que es mejor boxeador que él", finalizó Leonard.

Juan Carlos Carrillo es el segundo boxeador colombiano eliminado de los Olímpicos del 2016.