En el primer día, Lazio vendió apenas 11 abonos.

Esa fue la manera que encontraron los hinchas para protestar contra el presidente Claudio Lotito, a quien critican sobremanera. Lo culpan por el fracaso estruendoso del semestre anterior, en el que Lazio ocupó el puesto ocho, a 26 puntos de la Roma, su más encarnizado rival.

Al descontento se le sumó la renuncia de Marcelo Bielsa como seleccionador, antes de iniciar labores.

Según el prestigioso Gazzetta delo sport, la Lazio registra la peor venta de abonos en su historia. En el 2015 el club apenas vendió 12,800 entradas para un estadio Olímpico con capacidad para 72,698 espectadores.

La caída en el primer día de venta de entradas fue de más del 99.1%.