“Me voy al Carnaval de Barranquilla!”

-"¿A tus años? ¿Estás loca Matilde?”

-“¡Me muero por ver eso que llaman la Gran Parada”

Estos son los diàlogos de algunas de las 40 caricaturas del actor Robinson Díaz, expuestas en la Galería de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del Atlántico. 

Sí, resultó que el actor también es dibujante y que por muchos años ilustró las páginas del diario El Espectador y otros medios con su ácido humor gráfico, en donde se destacan la calidad artística y  dardos certeros a la política colombiana.

A pesar de que fueron cientos de ilustraciones las se se publicaron en esos diarios desde 1993, estas no salían con el nombre de pila del antioqueño. Él prefirió simplemente ser “Picho y Puchi” y separar esa personalidad de la del reconocido actor colombiano.

Otra cosa que nadie sabe de Díaz es que con “Picho y Puchi” el artista pudo pagar sus estudios de actuación y que ahora a sus 49 años de edad está orgulloso de ser de las personas en el mundo que gana dinero haciendo lo que más le gusta.

Para indicar un poco más sobre esta faceta de la estrella colombiana, el director del Carnaval de las Artes Heriberto Fiorillo lo invitó para su décima versión y en la inauguración del evento, este jueves 21 de enero ofreció una charla titulada ‘Al otro lado de Robinson Díaz’, en la que el recordado ‘Cabo’ de ‘El cartel de los sapos’ “se despachó” y habló de lo que le produce dibujar y los mensajes que busca  enviar con cada una de su caricaturas.

“Lo que más me gusta es que puedo ser yo mismo y expresar todo lo negro que llevo por dentro, lo que no me gusta de la sociedad y lo que se debe cambiar”, declaró.

Robisnon ve en la pluma y el papel una gran arma para movilizar masas, pero aclara que esta debe usarse con precaución.

“Lo bello de esto es la libertad que tenemos para expresarnos, pero nunca debemos hacer algo que atente contra la integridad de otros”, explicó la mañana del jueves en La Cueva.

Díaz recordó que desde niño comenzó con los trazos y que ya grande aprendió a ponerle diálogos y a encontrar el humor. “No ha sido tarea fácil, pero ahí voy”, dijo.

Sobre el conflicto armado por el que atraviesa el país, el actor ve el proceso de paz como “una cortina de humo”, para tapar los verdaderos problemas que aquejan a Colombia, entre esos “la falta de agua y la evolución”.

“Si comparamos a Bogotá con Medellín o Barranquilla, principales ciudades de cada región, Medellín y Barranquilla están evolucionando y eso hay que mejorarlo”, apuntó.

Amenazado

Robinson aprovechó el espacio para dar a conocer que lo han amenazado de muerte por su humor gráfico y que este es un “país es de corruptos”.

"Este es un país muy mal administrado, pésimamente gobernado, un gran vividero pero desafortunadamente tenemos gente que tira más para sus intereses que los demás. Como decía Pepe Mujica, aquí la gente hace la política para su propio bolsillo”, resaltó.

Sin embargo, el actor de Envigado continuará haciendo su trabajo.

Trabajo actoral

Robinson tiene un 2016 lleno de mucho trabajo. Tiene presentaciones pactadas en México con su obra humorística sobre ‘El Cabo’ y también recorrerá toda Colombia, incluyendo a Barranquilla con su obra con ‘Sex-zoo’.