Primera dama, Katia Nule, da inicio al proyecto ‘Cocina como vínculo incluyente’
La iniciativa beneficia a 120 mujeres cuyo sustento económico derive de la producción y venta de alimentos.
Con el fin de apoyar el fortalecimiento de las unidades productivas y mejorar la calidad de sus productos y servicios, la Alcaldía de Barranquilla, en el marco del eje estratégico de Autonomía Económica, emprendimiento e inclusión laboral, de la Oficina de la Mujer, Equidad y Género, realizará el proyecto ‘Cocina como vínculo incluyente y generador de medios de vida en el desarrollo integral de la mujer y género en el Distrito’.
La primera dama del Distrito, Katia Nule, realizó el lanzamiento de este proyecto que beneficia a 120 mujeres cuyo sustento económico derive de la producción y venta de alimentos.
Conscientes de que la cocina desarrolla la creatividad, la unión familiar, al igual que es fuente de inspiración para crear especialidades que unen a la familia y a la sociedad, este proyecto reforzará sus sueños como agentes de cambio en sus familias y modelo a seguir de sus hijos y, especialmente, fortalecer los negocios de alimentos liderados por las mujeres. Es la cocina ese espacio familiar y participativo que se expresa como un vínculo que congrega, en donde el alimento simboliza unidad, comunión familiar, social y comunitaria.
“Me siento muy contenta de ver cómo cada día nuestras mujeres se están preparando, se están empoderando mediante la formación en diferentes áreas. Estamos convencidos de que una sociedad en la que la mujer participe de manera activa a través de sus habilidades y talentos es una sociedad que avanza hacia la construcción de nuevos ciudadanos”, expresó Katia Nule.
Todas las mujeres seleccionadas cuentan con negocios o actividades productivas de alimentos, a las cuales se les fortalecerá con una formación complementaria en emprendimiento empresarial, con énfasis en el manejo administrativo y contable, y mercadeo, entre otros. La formación se basará, además, en el mejor uso de los alimentos, su preparación, en cómo variar un plato con los productos usados diariamente marcando diferencia y en el aprovechamiento de los alimentos en cosecha.
En el área psicosocial se reforzarán habilidades sociales, autoestima, proyecto de vida, manejo de las emociones, desarrollo de talentos y fundamentar que la cocina desarrolla la creatividad en unión familiar y el liderazgo de la mujer.
“La mujer es el eje del hogar, es el eje de la familia y sé que con este proyecto vamos a afianzar aún más esos lazos que nos hacen tan cercanos “, agregó Katia Nule.
El proyecto busca favorecer la recuperación de los medios de vida familiares y el empoderamiento de la mujer y de la población de género a nivel económico y social, desde prácticas culinarias; promover nuevos roles de género, a partir del fortalecimiento de la corresponsabilidad entre las familias, sus miembros, su comunidad y el desarrollo individual y colectivo de quienes la integran, todo ello a través de procesos de interacción formativa y respetuosa; estimular conciencias reflexivas de reconocimiento familiar, identificando comportamientos, saberes y dinámicas valiosas para ser replicadas entre sus miembros, que conduzcan al fortalecimiento de lazos de confianza y afecto, basados en la equidad y el respeto por la diferencia.
El programa cuenta, además, con un énfasis en integridad alimentaria, cuyo objetivo se centra en la cocina como el núcleo operativo y articulador de la comunidad. Se desarrolla a través de la inmersión en la convivencia comunal, conociendo y acompañando a cada individuo desde sus responsabilidades.