La violencia, el trago y la radio: el libro que recorre la historia sangrienta de Colombia en el siglo XX
"Discordia y progreso: la primera mitad del siglo XX en Colombia", del historiador Carlos Roberto Pombo Urdaneta.
Los primeros cincuenta años del siglo XX en Colombia no fueron solo una historia de progreso e industrialización, sino también un río de sangre y alcohol que marcó una era de profunda discordia.
En su libro "Discordia y progreso: la primera mitad del siglo XX en Colombia", el historiador Carlos Roberto Pombo Urdaneta desmitifica la idea de que la violencia fue la única causa de los males del país, revelando una historia donde el odio político, el alcoholismo y los medios de comunicación se entrelazaron en un cóctel explosivo.
Puede interesarle: Samuel Morales lanza 'La otra película', un tributo con esencia propia
Pombo resalta que el impacto de la radio, la oratoria y el alcohol en la violencia del siglo pasado ha sido escasamente estudiado.
El país, que presumía de tener más receptores de radio por persona que cualquier otra nación latinoamericana en la década de los cuarenta, escuchaba los discursos más encendidos en bares y tiendas. La oratoria incendiaria no hacía más que agitar las pasiones más primitivas, inspirando a la gente a empuñar machetes y fusiles.
El libro es una radiografía de los momentos más brutales de esa época: la Guerra de los Mil Días, un conflicto que dejó un número escalofriante de muertos; el genocidio de indígenas en la guerra con Perú; y la matanza de las bananeras, donde las balas acabaron con la vida de trabajadores indefensos.
En este contexto, el historiador relata cómo un general, embriagado, dio la orden de disparar a una multitud desarmada, mientras su cuerpo de seguridad se atrincheraba en un cuartel a seguir bebiendo. El alcohol, el machete y el fusil eran, literalmente, los pertrechos de guerra. Incluso en el Congreso, una balacera en vivo y en directo obligó a clausurar los bares del recinto y a prohibir el porte de armas.
La violencia cotidiana: de púlpitos y apelativos sangrientos
La brutalidad se vivía en cada esquina. La gente nacía con una filiación política, definiendo la convivencia por un odio feroz hacia "el otro partido".
La Iglesia, a través de monseñores como Miguel Ángel Builes, azuzaba el fuego desde el púlpito, llegando a decir que "ser liberal era pecado". En las calles, bandas paramilitares como los "pájaros" y los "chulavitas" asesinaban impunemente a liberales, aterrorizando a la población.
El libro de Pombo es un recordatorio de que la violencia en Colombia no fue un simple accidente. Fue alimentada por un sectarismo político que emborrachaba a la gente con alcohol y discursos de odio. Sin embargo, a pesar de todo, el autor destaca la capacidad de la sociedad para resistir y encontrar la civilidad necesaria para sobrevivir a la barbarie.
“Más que colombiano, se era liberal o conservador. Desde el nacimiento se definía la filiación política, y en la familia se fijaban las reglas de la convivencia y el antagonismo feroz hacia el otro partido”, explicó el autor del libro.
Además: Blessd, primer latino en inaugurar la gala del Balón de Oro en París

Un legado de sangre y contradicciones
La obra también retrata a los personajes que moldearon este turbulento periodo, desde el general Rafael Uribe Uribe, asesinado a hachazos, hasta el carismático Jorge Eliécer Gaitán, cuya voz transformaba a la multitud.
También se menciona a figuras como Laureano Gómez, un "orador fogoso" que amenazaba con volver "invivible la República", y a los notorios bandoleros y guerrilleros cuyos actos generaron un debate sobre si eran simples criminales o verdaderos revolucionarios.
El libro "Discordia y progreso" es una pieza fundamental para entender la brutalidad, la complejidad y las contradicciones de una época que definió el rumbo de una nación.
Pombo muestra una historia sin adornos, una historia donde el progreso se construyó sobre un río de sangre y licor, una historia que nos invita a reflexionar sobre las raíces de nuestra propia violencia.
El libro será presentado en el Gimnasio Moderno de Bogotá, el 24 de septiembre, en una conversación a las 6:30 de la tarde, entre el autor Carlos Roberto Pombo y el escritor y periodista Juan Esteban Constaín.