Lo que más impresionó a los coreógrafos de Barranquilla no fue la forma tan fluida de bailar de la Reina del Carnaval de Barranquilla, Marcela García Caballero, sino la impresionante puesta en escena que se desplegó en el Plaza de la Paz la noche del sábado 16 de enero.

Más de 450 actores, bailarines y hacedores del Carnaval se dieron cita con la tradición para abrir las puertas de lo que será un Carnaval de historias y leyendas 2016.

Rompiendo con las reglas, la Reina Marcela García Caballero decidió que su bando, de su propia cosecha, no se leyera al final, sino dentro del mismo espectáculo.

Por eso, durante las cinco sectores de la gozadera, propuesta que encerraba el show titulado ‘La esquina del sabor’, la soberana leyó cada uno de sus cinco artículos que entre picardía, picante y uno que otro llamado de atención, sacó miles de sonrisas a los más de 5 mil asistentes que se congregaron en la Plaza de la Paz.

Zona Cero habló con varios coreógrafos quienes dieron su punto de vista sobre el show y todos acertaron en que “El Bando de Marcela fue un espectáculo para recordar”.

El bando enérgico

El coreógrafo Carlos Coronado está seguro que la Reina se lució “que era lo importante” y que su show fue un espectáculo lleno de mucha energía.

“Fue un Bando enérgico, lleno de mucho sabor y tradición. Yo no le hubiese cambiado nada porque así está bien. Pienso que la idea era que Marcela se luciera y efectivamente así fue. Con este Bando quedó demostrado que ella baila y muy bien y es un premio a toda la dedicación y entrega que ha dado a su público y a esta Carnaval", dijo.

Una Reina atenta y amable

El coreógrafo Juan Cerpa ve a Marcela como una Reina amable, entregada a su Carnaval y dispuesta a lograr diferentes propuestas. Para él. el Bando estuvo lleno de mucho sentimiento y apoyo a la tradición.

“Desde septiembre se comenzaron los ensayos y se ven los resultados porque fue un espectáculo muy nuestro. Nunca había visto una reina tan amable y preocupada por los demás, yo creo que eso hace que Marcela sea única”. concluyó.

Se superaron las expectativas

Danilo Peña cree que gracias al trabajo en equipo se superaron las expectativas y Barranquilla disfrutó de un Bando de recuerdo.

“No necesitaba que se le cambiara nada. Estaba perfecto. La Reina fue única y todos llegamos a la conclusión de que nació para reinar. Fueron muchas horas de ensayo y al final obtuvimos nuestros frutos, los barranquilleros se fueron satisfechos y alegres", comentó.

Con las pilas puestas

El coreógrafo Ricardo Sierra destaca la energía de todo el equipo de trabajo y como los más de 450 bailerarine  tenían "las pilas puestas”.

“Ellos siempre estaban atentos a todas las indicaciones al igual que la Reina. Marcela es una niña muy disciplinada y perfeccionista. Le gusta ensayar hasta que no se presente ni un mínimo de error. Ver la satisfacción en la cara de los miles de asistentes, fue el mejor regalo”, concluyó.

Con Marcela se olvidó el cansancio

Para Mónica Lindo, la producción fue tan bien estructurada a que la gente olvidó que estaba de pie desde las 5 de la tarde para iniciar un show a las 8:30 de la noche.

"Su historia en el carnaval empezó entonces a construirse en medio de aspectos que marcaron la diferencia, por ejemplo la forma en la que se lee el Bando, no fue al final, sino en medio de cada escena y  'La esquinas de la gozadera' lo cual lo hizo ameno, comprensible , contextualizado y emocionante . El incorporar a los protagonistas del Carnaval como Matilde y Angélica Herrera, Joselito Pérez, Paraguitas, Brianne Velásquez, Humberto Pernet , las directoras de los paloteos entre otros, en un espacio escénico no acostumbrado por lo general para ellos, fue un oportuno reconocimiento a su labor, porque son los que año tras año, se han dedicado a formar a miles de generaciones y con sus agrupaciones han sido los que deleitan al público con sus danzas en cada desfile, y sobre todo marcar la diferencia descentralizando su Bando haciendo un recorrido y presencia en otros sectores de la ciudad fue una muy buena iniciativa.

Cuando el público no tiene la oportunidad de mirar para otro lado, cuando no hay tiempo de conversar con tu compañero de silla o de pie, cuando la sonrisa no deja de aflorar en tu rostro con cada lectura de los textos del bando, significa que más de una cosa buena está ocurriendo en el escenario, que es entretenido, que la música atrapa y está bien escogida y que se mantienen la atención porque te sientes identificado. Allí hubo una bonita combinación de lo folklórico con lo urbano sin ser en exceso extranjerizantes, lo que sonó musicalmente muy seguramente transportó a muchos a momentos especiales de sus vidas y hacia que sus cuerpos bailaran también desde su lugar de espectador.

Más allá del cuestionamiento que pueda suscitarse de la técnica o no de los bailarines, de la pertinencia o no del diseño de los vestuarios, de lo ostentoso o la simplicidad del escenario, lo más importante es la sensación que se produce en el alma y en el corazón del barranquillero intelectual, del común y corriente en ese preciso instante en el que el primer bailarín y la reina pone su pie en el escenario para decir, por fin llego el momento!. Se escuchan los aplausos y es definitivamente la mejor recompensa para un intérprete que prefirió destinar los domingos, las noches y el tiempo libre, las fiestas de navidad o fin de año para asistir a un ensayo o a los preparativos de lo que se convierte en el primer evento oficial del carnaval, y es lo que muchas veces el espectador no tiene en cuenta, y no tendría que hacerlo, ya que detrás de un evento como el de anoche la mano y dirección de una persona como Pedro Díaz y de Ricardo Sierra , su apoyo, se notó al saber direccionar a más de 300 personas en medio de un agradable ambiente conformado por padres, madres, hijos, maestros, bailadores, bailarines profesionales, músicos y actores que dedican parte de su tiempo a una pasión llamada danza y a un estilo de vida llamado carnaval", destacó.

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