Los más veteranos fueron los encargados de imponer el color, la alegría y el fandango sobre el asfalto de la Vía 40.

Así arrancó la Gran Parada de Comparsas de Fantasía, uno de los eventos más esperados en el Carnaval de Barranquilla.

Ilusiones del Adulto Mayor, La Mucura del Adulto Mayor, Impacto Social Tercera Edad de Cevillar, Navegantes del Caribe, Los Rumberos 3ª Edad, Girasoles Gozando en Carnaval, fueron los encargados de prender la fiesta. El público los ocasionó.

El desfile tuvo un cambio de frente, en cuanto a danza. Apareció en escena la comparsa Son Latino que, con su salsa, puso a gozar al Cumbiódromo.

El ritmo aumentó con la entrada en escena del grupo Africa Mía, un clásico en el Carnaval de Barranquilla. Con champeta y música africana, realizaron un baile innovador.

Luego sonó la samba, teniendo como protagonistas al grupo Los Rumberos del Hipódromo.

Los primeros soberanos en aparecer fueron los Reyes Infantiles del Carnaval, Isabella Chacón y César De La Hoz, quienes despertaron los aplausos en los asistentes.

Lastimosamente, Isabella sufrió un desmayo durante el desfile y tuvo que ser sacada de la Vía 40, por varios paramédicos. La menor fue trasladada a una clínica de la ciudad, debido a un cuadro gripal.

Los representantes de los niños le abrieron el paso a las Casas Distritales de Cultura de Barranquilla, quienes le hicieron un homenaje a los 50 años del Festival de Orquestas.

Después llegó la presentación de la comparsa Kadanza, de las pocas que contaba con un tráiler durante el desfile. El color de su vestuario llamaba la atención de inmediato.

El grupo era liderado por la Emperatriz Nacional de la Cumbia, María José Barraza.

Otra de las comparsas que cautivó en el desfile fue Estrellas para un Carnaval. Impusieron la samba y se ganaron la ovación del público.

La samba siguió reinando de la mano del grupo Princesa Makemba, el cual brotó alegría hacia las graderías del Cumbiódromo.

Pero apareció otro cambio extremo, teniendo como protagonistas a Las Marimondas de Barrio Abajo.

La papayera iba sonando con toda y las 900 marimondas bailando con mucha energía, para conseguir el Congo de Oro 34 en sus vitrinas y el más especial porque sería un gran homenaje al gran César 'Paragüita' Morales, el fundador de esta comparsa, que falleció el año anterior.

La papayera siguió con el mando en el desfile, pero esta vez teniendo como protagonista a la comparsa El Torito.

Pero las marimondas volvieron a aparecer con su irreverencia y gracia inigualable. El grupo las Tronco E' Marimonda innovó con el color de su vestuario.

La rumba siguió prendida y apareció el Rumbón Normalista. Los más pequeños de esta comparsa fueron aplaudidos de principio a fin por el público.

Sin embargo, la gente explotó en emoción cuando apareció en escena la Reina del Carnaval de Barranquilla, Carolina Segebre, quien portó un vestido alusivo a la naturaleza.

La soberana puso a bailar al público, al ritmo de la canción del Carnaval, "Pura Alegría". La cambambería se tomó el Cumbiódromo de la Vía 40.

Después del paso de otros grupos y con su vestido de soberano, apareció el Rey Momo del Carnaval, Freddy Cervantes, quien compartió con el público que colmó los palcos de la Vía 40.

Brasil volvió a decir presente con la presentación de la comparsa Carioca. Bailaron una samba rápida con precisión y alegría.

La Armada Nacional dijo presente en las postrimerías del desfile, con su banda marcial. 

El público permanecía intacto en las graderías, esperando el final del desfile.

Los ritmos africanos, latinos y tropicales fueron los encargados de cerrar con broche de oro un desfile, que estuvo lleno de alegría, color, fantasía y cambambería.