Un verdadero desfile musical fue el que pudo apreciar el público presente en el gran Festival de Orquestas realizado en el estadio Romerlio Martínez.

Desde que arrancó los asistentes se deleitaron con la presentación de las diferentes agrupaciones y sus respectivos temas, así:

- La Bandola: Compréndeme, Cumandé y La Dueña del Swing.

- Orquesta Son Marino: Homenaje a Pedro Ramaya, Mosaico Irene Martínez y Homenaje a Totó la Momposina.

- Orlando Sandoval: Qué nos pasó, El Gavilán y Mosaico Carnavalero.

- Ce-Tambó: Pachuco, Modo Carnaval y Homenaje al Carnaval.

- Orquesta Klásica de Ibagué: Quién lo sabe bailar, A donde me meto yo y Mosaico Carnaval.

- Cumbia Caribe: Suena tu tambó, El santo parrandero y Mosaico Candela.

- Miriam Cruz: La loba, Media María y  El Torito. 

- Son Palenque: Arepa asá, Qué tiene esa mujer y Los pasteles. 

- Jimmy Mazzeo: Nací para quererte, Te olvidé y Mosaico Carnavalero.

- Big Band Pacho Galán: Homenaje a Checo, Merecumbe y Joselito Carnaval. 

- Ébano Orquesta: Salsa caliente del Japón, Ahora soy feliz y Quimbara. 

- Fredy Acosta: Como tú ninguna, Gozando en Carnaval y Popurri Sergio Vargas.

- Dionis K Da Uno: Vamos a ser un can, Te falta el amor y Baile en la calle.

- Bonny Cepeda: hizo un recorrido de sus éxitos comenzando por ‘Una Fotografía’ y sorprendió al público cuando uno de sus músicos cayó en la tarima y todos salieron en su auxilio. Enseguida el artista retomó cantando el tema ‘Ay Doctor’. Un sorpresivo show.

- Óscar Prince: a su mejor estilo y con sus ritmos. Pero se robó el show con un mosaico bien concebido incluyendo clásicos de la verbena como ‘La mujer ajena’, ‘Homenaje a los embajadores’, ‘El Evangelio’ y ‘Pemba Laka’.

- Orquesta Son del Sabor: Me gustas, Agúzate, Aguanile y cerró con una cortinilla de En Barranquilla me quedo.

En esta presentación hizo presencia la joven cantante barranquillera Caliope interpretando el tema salsero Aguanile.

- Danny Daniel: Perdóname, Un Montón de Estrellas y No me hagas sufrir.

- Orquesta Internacional de la Policía: sin desprenderse de su uniforme ofrecieron un excelente espectáculo interpretando ritmos de la región.

- Alfredo De la Fe y sus estrellas: El negro está cocinando, Oyelo tocar y La Candela. El artista cubano está radicado en Barranquilla desde hace varios años y considera a La Arenosa como la mejor ciudad del mundo.

- Alejah: la cantante vallenata interpretó Falso Positivo, Amarte más no pude y El morisquetero.

- Aisha, La diva de la salsa: Tú eres el hombre, Adiós amor y Bidi Bidi Bom Bom.

- Nolan Orquesta: Fiesta en corraleja, Ella es mi fiesta, Cielito lindo y homenaje a Juan Piña con la Tumba Catre.

En esta oportunidad el Festival de Orquestas inició la tarde de este domingo en la que es su casa natural durante las últimas décadas, el estadio Romleio Martínez, en todo el corazón de la popular calle 72. Una vez más, las mejores agrupaciones musicales se dan cita para competir por el ‘Congo de Oro’. 

Sobre las 3:23 de la tarde el primer grupo de los 48 confirmados en participar, la Orquesta La Bandola, subió a la tarima principal para comenzar el Festival, una insignia del Carnaval que este año, tras no haber podido realizarse por los estragos de la pandemia presentó una lista interesante de regresos. 

El primero de ellos es el retorno al Romelio Martínez tras su anterior paso por la Plaza de la Paz como sede alterna. Hay que recordar que desde su primera edición en 1969 el Festival pasó por sitios como el Club de Leones, el Coliseo Humberto Perea, hasta establecerse en el ‘Coloso de la 72’. 

Igualmente el retorno de los homenajes que este año tuvo dos en particular: el central, a la obra del Checo Acosta y otro más en honor a la champeta y el vallenato, géneros populares que se han vuelto parte del decorado carnavalero. 

La gran novedad del presente Festival fue el cambio de día, pues pasó de lunes como había sido tradicional, a desarrollarse desde la tarde del domingo.

Pese a eso, la presencia de público fue baja inicialmente pero con la caída del sol muchos más rumberos y melómanos se fueron uniendo a la celebración, con un cartel más que interesante.