"Colombia no ha tenido una mujer presidente y ya es hora de que una mujer lo sea".  Eso es algo que tiene presente la sincelejana María del Rosario Guerra De la Espriella, una de las precandidatas de Centro Democrático a la Presidencia de la República. 

En su visita a ZonaCero.com,  la senadora Guerra De la Espriella indicó que "las mujeres se han preparado y hemos demostrado en el trabajo que somos dedicadas, responsables y competentes, adicionalmente hemos demostrado que somos personas honestas y trabajadoras y el tercer argumento es que el Caribe colombiano no ha tenido presidente desde Rafael Núñez".

Guerra De la Espriella quiere ser presidente, primero para "reinventar la política", "la forma de concebir el país "y "las relaciones entre los poderes públicos", "recuperar la credibilidad y gobernabilidad que el Presidente Santos dejó perder en el Ejecutivo" y "que muestre que con la mano firme va a tener un corazón generoso para los más vulnerables, proteger la familia, reducir la pobreza, luchar contra la corrupción, para luchar contra todos aquellos que quiere afectar la institucionalidad" y "para abrirle camino a las futuras generaciones de que sí hay esperanza".

La senadora estuvo reunida en los dos últimos días con líderes de Centro Democrático en el Atlántico buscando el apoyo necesario a sus aspiraciones de candidatura, de cara a la elección que se plantea al interior del partido entre los otros 5 precandidatos. "Son personas competentes, inteligentes, comprometidas, que también quieren servirle al país, si algo nos enorgullece es tener en el partido 6 precandidatos presidenciales totalmente disponibles para servirle a Colombia", dijo sobre Iván Duque, Paloma Valencia, Rafael Nieto Loaiza, Carlos Holmes y Argemiro Garzón.

Según Guerra, los colombianos están añorando que el partido Centro Democrático tome el poder.

Frente a la polaridad que se vive en Colombia, la precandidata sostiene que su partido quiere recuperar el tejido social que el acuerdo Gobierno- Farc acabó. "Hasta en las familias, vecinos, hubo divisiones,  no se debatía con argumentos sino casi que con rabia y se volvían confrontaciones duras. Nuestro partido ha entendido que los argumentos, los principios y tercero firme con las ideas y suaves con las personas, tenemos que recuperar el diálogo y la confianza", opinó.