Miguel Uribe Londoño, “seguro de ganar la encuesta del Centro Democrático”
Hizo un llamado a la unión de la derecha en la consulta interpartidista.
Miguel Uribe Londoño, precandidato presidencial por el Centro Democrático, se refirió al proceso interno de la colectividad para elegir al aspirante que irá a las urnas en mayo y a las razones morales que lo impulsaron a tomar las banderas de su hijo, el asesinado senador Miguel Uribe Turbay.
Uribe Londoño, quien se define como empresario y no como político profesional, aseguró que su candidatura es un “deber moral” y se mostró seguro de ganar la consulta interna del partido.
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Candidato se define en noviembre: "Yo voy a ganar"
El precandidato le confirmó a Zona Cero que los cinco aspirantes del Centro Democrático se reunieron y acordaron que el candidato oficial será anunciado el 28 de noviembre de este año, tras la realización de una encuesta.
Se mostró optimista sobre el resultado interno: "Yo voy a ganar la encuesta. Eso es lo que nos muestran los sondeos de opinión que tenemos hoy".
Llamó a la unidad del sector, afirmando que su objetivo es “ganarle al que sea el representante de Petro”, buscando principios comunes como la seguridad, el ataque al narcotráfico y la justicia.
Sostuvo que el perfil del candidato ya está definido, no obstante, al ser consultado sobre por qué debe ser él, reconoció que aunque no sea un "político profesional, yo soy un empresario que sé generar empleo, sé generar riqueza, sé pagar impuestos, sé formar equipos de trabajo. Infortunadamente mi hijo Miguel, que iba a ser el candidato del Centro Democrático, que iba a ser el próximo Presidente de Colombia, por eso lo mataron, para silenciar sus ideas. Esa circunstancia, esas banderas de Miguel, lo que Miguel le proponía para transformar a Colombia, había que seguirlas".
Añadió que, "el expresidente Álvaro Uribe Vélez nos pidió a la familia que pusiéramos otro precandidato en vez de Miguel. A los cuatro días de haber enterrado a Miguel, la familia decidió conmigo a la cabeza que la persona ideal para hacer eso era yo, para poder sacar las banderas de Miguel adelante, el legado de Miguel adelante. Yo creo que, no, estoy seguro que el que puede hacer eso soy yo y el mejor para hacer eso por la situación que me ha tocado vivir".
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Miguel Uribe Londoño tuvo palabras amables para sus potenciales contendores en la consulta interpartidista y candidatos de la derecha como Abelardo De la Espriella Vicky Dávila: “Me parecen excelentes personas… nos tenemos que unir”.
La inseguridad en Barranquilla
El precandidato presidencial afirmó desde Barranquilla que la situación de inseguridad y violencia en Colombia ha alcanzado un nivel crítico, con más de la mitad del territorio nacional "en manos de los violentos".
Centró sus críticas en la política de "Paz total" del Gobierno, asegurando que el problema actual radica en la “voluntad presidencial” de Gustavo Petro.
El empresario rechazó las mesas de diálogo con cabecillas de bandas criminales, estableciendo una condición innegociable para cualquier negociación de paz.
“Eso comienza por deponer las armas y parar de delinquir... Y hoy se pretende conversar siguiendo combatiendo, eso es imposible, eso no existe”, declaró.
"Se acabó la fiesta": promesa de mano dura
El precandidato argumentó que la inseguridad, los secuestros y la extorsión han llevado al país al borde de la desintegración, y acusó al Presidente de permitir que el país “se arrodille ante la violencia”.
"El control territorial está hoy, más de la mitad del país está en manos de los violentos, de los grupos armados ilegales, y eso tiene que pararse", sentenció Uribe Londoño. "Estamos en esa situación porque el Presidente Petro lo permite. Él no quiere tomar el control del país o lo ha cedido, una de las dos cosas, las dos son tumbas".
Prometió que, de ser elegido, su gobierno tendrá una postura de mano dura: “El 7 de agosto de 2026, yo tengo la voluntad de decir, esto se acabó, se acabó la fiesta, habrá cárcel, no habrá más impunidad” .
Para restaurar la seguridad, el precandidato se enfatizó en la necesidad de restablecer la autoridad presidencial y la orden para que el Ejército y la Policía puedan actuar: "Hoy un soldado y un policía se tienen que arrodillar ante los criminales para que no los maten. Eso es lo que se tiene que acabar".
Compromiso con Barranquilla
Al referirse a la ciudad de Barranquilla, Uribe Londoño destacó la necesidad de fortalecer la seguridad, señalando que una de cada cinco personas en la ciudad ha sido víctima de un delito.
Prometió gobernar de la mano con el alcalde, destacando la "muy especial" administración local por ser una ciudad "que cumple", y prometió apoyo descentralizado del Gobierno para mejorar la calidad de vida en la capital del Atlántico.
Hostigamiento de Petro y el dolor de la violencia
Finalmente, Miguel Uribe vinculó directamente la muerte de su hijo con la “violencia política y verbal de Petro” . Recordó que, pocos días antes del asesinato, el Presidente habría aludido al senador, lo que sirvió para “exacerbar la violencia” .
"Él es el responsable político de la muerte de Miguel por la forma como su violencia verbal lo atacaba, como llegó a decir pocos días antes de su muerte, es que Miguel es el nieto de un Presidente que torturó a 10.000 personas, el senador Miguel Uribe Turbay debe desaparecer ", aseguró.
El precandidato enfatizó la empatía que tiene con las víctimas del país debido a su historia familiar, que incluye el secuestro y asesinato de la madre de su hijo (periodista Diana Turbay) por Pablo Escobar hace 34 años.