Magnicidios de Luis Carlos Galán y Miguel Uribe.
Magnicidios de Luis Carlos Galán y Miguel Uribe.
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Archivo Pontificia Universidad Javeriana / Facebook Miguel Uribe Turbay

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36 años del magnicidio de Galán y un país golpeado otra vez por la violencia política

Este lunes 18 de agosto se conmemora un año más del asesinato del líder liberal. Su hijo Juan Manuel comparó el crimen con lo ocurrido a Miguel Uribe.

La conmemoración de los 36 años del magnicidio de Luis Carlos Galán Sarmiento adquiere un eco trágico este año, al coincidir con un momento de alta tensión política y el reciente asesinato del senador Miguel Uribe Turbay.

En entrevista con Zona Cero, el precandidato presidencial Juan Manuel Galán, hijo del recordado político liberal, abordó este sombrío paralelismo, el legado de su padre, el estado de la democracia y los desafíos que enfrenta el país, justo cuando este lunes 18 de agosto, se cumple un año más de la muerte del fundador del Nuevo Liberalismo.

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Un legado de esperanza frente a la violencia

Juan Manuel Galán, quien también es precandidato presidencial, recordó el dolor de la pérdida y la motivación que su familia ha encontrado para honrar la memoria de su padre.

"Hemos buscado que sus ideas, que todo lo que él trabajó para el país... se pueda materializar", dijo. Para él, la mejor manera de hacerlo es combatiendo las causas estructurales del crimen con la presencia del Estado y una distribución equitativa del ingreso.

El político compartió un recuerdo personal que guarda como un tesoro: una tarde que su padre le dedicó para ayudarle a preparar un simulacro de posesión presidencial para una clase en el bachillerato.

"Yo debía dar en el Instituto Pedagógico Nacional, porque yo estaba estudiando bachillerato normalista, bachillerato pedagógico, y estaba en época de prácticas con los niños de segundo y tercero de primaria, y teníamos que hacer un simulacro de posesión presidencial, y se fue conmigo toda una tarde a la Plaza de Bolívar, y estuvimos hablando y me dijo qué les podía decir a los niños, cómo podía orientar la clase y me permitió entrar al recinto del Senado con los estudiantes para que vivieran realmente en el recinto del Congreso cómo era una posesión presidencial. Ese es el recuerdo que más presente tengo y el más inmediato que guardo siempre como un tesoro", confesó.

"Galán vive en el corazón de millones de colombianos"

Luis Carlos Galán Sarmiento fue asesinado el 18 de agosto de 1989.

A lo largo de su historia, el partido Liberal o Nuevo Liberalismo, ha enfrentado divisiones internas, luchas por el poder y escándalos de corrupción que han debilitado su imagen y credibilidad, pese a ello, Galán hijo asegura que los ideales de su padre permanecen intactos, no solo en el partido sino que también "viven en el corazón y la mente de millones de colombianos".

Resaltó la necesidad de "una política transparente, sin clientelismo ni tráfico de influencias", un camino que, según él, su padre ejemplificó y que el país anhela hoy más que nunca.

"Millones de colombianos anhelan una política que esté al servicio realmente de la gente", enfatizó.

Añadió que, "el mensaje de Luis Carlos Galán es que el camino de Colombia es el de la democracia, el camino de la Constitución de 1991, el camino de la presencia de justicia en todo el territorio".

La raíz del problema

Para Juan Manuel Galán, el asesinato de Uribe Turbay es una dolorosa "repetición de la violencia" que ha marcado la historia de su familia.

"Lo que ocurrió con Miguel Uribe Turbay es la historia de la repetición de la violencia en cabeza de su mamá Diana, que fue asesinada cuando él tenía cuatro años y en cabeza de su hijo Alejandro, que hoy ve a su padre asesinado", lamentó.

Comparó la situación actual con la de 1989, señalando que la raíz de la violencia radica en la ausencia del Estado en territorios fronterizos.

"Allá quienes son o fungen como Estado son las organizaciones criminales", advirtió. Para evitar que la historia se repita, el exsenador propuso una "seguridad multidimensional" que combine la fuerza pública con infraestructura social y oportunidades para la población.

Juan Manuel Galán, hijo del asesinado político liberal, Luis Carlos Galán.

Los políticos: "antes de hablar, escuchar"

Sobre el lenguaje político polarizante, Galán sostuvo que "el más responsable de todos por el poder que ostenta es el Presidente de la República", a quien le pidió moderar el lenguaje y promover la unidad.

"Él es el primer llamado a moderar el lenguaje, a enviar mensajes de unidad nacional, no de división, de confrontación, de descalificación personal de cualquiera que se atreva a pensar distinto al dogma ideológico que pretende imponer el Gobierno", expresó.

Agregó que, "las reformas que necesita el país son reformas que tienen que lograrse por consenso, escuchándonos todos los colombianos, todos los actores construyendo en conjunto, pero construyendo también sobre la base de lo que es viable presupuestalmente, sin mentirle a la gente. Ese discurso político se tiene que moderar desde el Presidente de la República y tenemos los políticos antes de hablar, escuchar".

Galán también aseguró que, "las soluciones del país se construyen de abajo hacia arriba, no de arriba hacia abajo. Se construyen escuchando a la gente en los territorios, entendiendo su realidad. El discurso político de confrontación, de pelea permanente nos distrae (...) porque la violencia que asesinó a Luis Carlos Galán viene del narcotráfico y de las alianzas del narcotráfico con políticos, con paramilitares, con miembros de los organismos de seguridad del Estado, esos fueron los responsables del asesinato de Luis Carlos Galán".

Tomar medidas para la seguridad de los candidatos

En cuanto a la seguridad de los precandidatos, Galán fue enfático: "El Gobierno debe tomar todas las medidas".

Aunque reconoció la difícil tarea de la Unidad Nacional de Protección (UNP), exigió "el fortalecimiento de la fuerza pública y el monopolio de la fuerza en el territorio para garantizar unas elecciones libres y justas".

Finalmente, criticó la política de "paz total", calificándola como "fallida" y afirmando que ha fortalecido a las organizaciones criminales en lugar de someterlas.

Advirtió sobre la creación de "zonas de ubicación temporal", que a su juicio podrían convertirse en "santuarios narcotraficantes" en plena época electoral.

Galán concluyó que el Estado debe aplicar la ley sin contemplaciones y no aceptar más excepciones para la impunidad. "El Estado debe someter a los criminales a la justicia sin contemplaciones y aplicar la ley penal sin excepciones", finalizó.

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