Un reloj con GPS para ayudar a reducir las agresiones sexuales
Leaf Wearables comenzó hace tres años con Safer Smart Jewellery.
Una empresa india fundada por cinco ingenieros en 2015 se ha hecho con el millón de dólares del premio XPRIZE por inventar un reloj que permite enviar la ubicación y un audio en directo a sus contactos sin necesidad de un teléfono, lo que puede ayudar a reducir las agresiones sexuales.
Los cinco jóvenes decidieron utilizar su fuerte, la tecnología, para atajar un problema que ha puesto en el ojo del huracán a la India, donde sólo en 2016 se denunciaron 38.947 violaciones, según datos de la Agencia Nacional de Registro de Delitos (NCRB).
La andadura de su empresa, Leaf Wearables, comenzó hace tres años con Safer Smart Jewellery, un colgante con un botón camuflado que funciona con bluetooth y al ser pulsado envía una señal al teléfono inteligente de la víctima, que posteriormente envía la ubicación a sus contactos.
Luego vino Safer Plus, basado en la "misma tecnología", pero mucho más pequeño y con bluetooth BLE 4.0, la última versión en aquel momento, explicó a Efe uno de los cofundadores de Leaf, Avinash Bansal.
Leaf vendió cerca de 10.000 unidades de estos dos productos en Turquía, Malasia, Estados Unidos y "cerca de otros 15 países", afirmó Bansal.
Sin embargo, al buscar la opinión de los clientes, se dieron cuenta de que para mejorar el producto debían conseguir que este funcionase "por si mismo", sin necesidad de un teléfono inteligente.
Y así nació Safer Pro, la tercera versión.
"Nos dimos cuenta de que la mayoría de la gente estaba diciendo que lo primero que un atacante va a hacer es coger el teléfono y hacerlo pedazos", sentenció el cofundador.
También les comentaron que antes de ser atacadas las potenciales víctimas tenían un "amplio" espacio de tiempo, por lo que Leaf decidió incorporar un segundo botón con el que iniciar la retransmisión de audio en directo a las personas que van a realizar el rescate, sea un contacto o la Policía.
De este modo, la víctima puede ofrecer detalles sobre su ubicación para facilitar el rescate, tal y como el piso del edificio en el que se encuentra, algo que el GPS no es capaz de detectar.
En cuanto al diseño, Leaf pretende que el aparato se pueda insertar en correas de diferentes colores e incluso se plantea colaborar con empresas de joyería para poder ofrecer correas de metal a quienes estén interesados en poseer un producto "más bonito".
"Es lo más sencillo posible, abres la tapa, pones una tarjeta SIM y está listo para funcionar", afirmó Bansal, al precisar que esperan comenzar a comercializarlo a principios de 2019 por unos 40 dólares en sitios de comercio electrónico y también en tiendas físicas.
"Todavía estamos en la fase final de prueba del producto, la parte de ingeniería está casi completa, ahora lo estamos probando y estamos tratando de hacer un lanzamiento global en cuatro o cinco meses", concluyó.
Fue la "precisión de la ubicación" y la "increíble duración de su batería", de hasta 10 días, lo que les hizo ganar el XPRIZE para la Seguridad de la Mujer, un proceso que comenzó en 2016 y durante el que tuvieron que enfrentarse a diferentes pruebas para demostrar finalmente en junio pasado que su producto era el mejor.
No obstante, la reputada activista y directora del Centro Social de Investigación de Nueva Delhi, Ranjana Kumari, considera que este es solo un paso más y que el rescate de la víctima es el verdadero problema.
"Hay diferentes tipos de mecanismos de seguridad que han surgido, pero la dificultad no es el proceso de pasar la información, (...) cuando la mujer informa tiene que haber una patrulla policial que llegue al lugar o un familiar", destacó a Efe.
"En la mayoría de los casos la Policía llega tarde", sentenció.
Advierte, además, de que las cifras oficiales que registra el NCRB son apenas un 20 % de las violaciones reales, ya que la gran mayoría de las víctimas en zonas rurales no denuncian las agresiones por la "vergüenza social" o su poca confianza en que se haga justicia.
De cada cinco casos de violación, afirmó Kumari, solo uno se denuncia.
EFE