La Presidenta de Perú declara ante la fiscal general por muertes en protestas
Por los delitos de genocidio, homicidio calificado y lesiones graves.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, declara este martes ante la fiscal general peruana, Patricia Benavides, como parte de la investigación preliminar que se le ha abierto por las muertes producidas durante las manifestaciones antigubernamentales que comenzaron en diciembre pasado en el país andino.
La Presidencia peruana confirmó en Twitter que la gobernante "llegó a la Fiscalía para brindar declaraciones respecto a las investigaciones que sigue el Ministerio Público".
Boluarte ingresó a la sede del Ministerio Público hacia las 08.50 horas (13.50 GMT) a bordo de en un vehículo oficial que ingresó sin que se le viera por la zona posterior del edificio, que se encuentra en la céntrica avenida Abancay, a pocas cuadras del Palacio de Gobierno de Lima.
La jefa de Estado fue citada por Benavides para que declare en la investigación por la presunta comisión de los delitos de genocidio, homicidio calificado y lesiones graves, abierta contra las máximas autoridades del Gobierno peruano tras las decenas de muertos que se han producido en las protestas.
En esta investigación, que aún tiene carácter preliminar, se ha incluido al actual primer ministro, Alberto Otárola, y a su antecesor, Pedro Angulo, así como al ministro de Defensa, Jorge Chávez, y a los exministros del Interior Víctor Rojas y César Cervantes.
Al tratarse de altos funcionarios, el caso está a cargo de la fiscal general Benavides y compete al despacho del Área de Enriquecimiento Ilícito y Denuncias Constitucionales.
El pasado fin de semana, la abogada de Boluarte, Kelly Montenegro, declaró que la presidenta había decidido acudir a la citación en la sede del Ministerio Público a pesar de que inicialmente pidió que su declaración se realice de forma virtual.
Montenegro aseguró que la decisión de Boluarte "de participar en la diligencia de la Fiscalía siempre ha sido positiva" y que "nunca ha habido intención de querer entorpecer u obstaculizar el trabajo" que hace el Ministerio Público.
Boluarte señaló el pasado viernes que iba a asistir "con sumo agrado" a la citación para declarar cuando la Fiscalía la notifique de la diligencia.
Las víctimas de las protestas
Las protestas estallaron en Perú tras el fallido golpe de Estado del expresidente Pedro Castillo el 7 de diciembre pasado y continuaron desde enero con movilizaciones y enfrentamientos con las fuerzas del orden en demanda de la renuncia de Boluarte, el cierre del Congreso, el adelanto de las elecciones generales y la convocatoria a una asamblea constituyente.
Según la Defensoría del Pueblo, al menos 48 civiles murieron durante enfrentamientos con las fuerzas del orden, mientras que un policía perdió la vida tras ser quemado vivo y otras 11 personas debido a los bloqueos de carreteras por manifestantes.
Boluarte confirmó otro fallecimiento por estas mismas causas, el de un paciente que necesitaba llegar a Lima pero quedó retenido en los bloqueos, y Unicef informó del deceso de un bebé nonato, además de la muerte de una mujer en la norteña región de La Libertad, reportada por la Policía.
Otárola confirmó el 19 de enero pasado el fallecimiento de cuatro ciudadanos haitianos y días más tarde la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) elevó la cifra a siete ciudadanos de ese país que quedaron varados, expuestos a adversidades climáticas y limitado acceso a servicios básicos.
Este lunes se confirmó la muerte de 6 militares, que se ahogaron al intentar cruzar el río Ilave, en el sur del país, para evitar un enfrentamiento con manifestantes de esa zona de la región de Puno, donde se mantienen los bloqueos de caminos y paros desde enero pasado tras una dura represión que provocó la muerte de 18 personas en la ciudad de Juliaca.
EFE