Estados Unidos inaugura su embajada ante Israel en Jerusalén
En medio de dos manifestaciones separadas, una a favor y otra en contra de esta decisión histórica.
Ivanka Trump, en nombre de su padre, el presidente estadounidense, Donald Trump, junto al secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, destaparon hoy la placa que inauguró la embajada de EEUU ante Israel en Jerusalén, en una histórica ceremonia.
"En nombre del 45º presidente de Estados Unidos de América, os damos la bienvenida oficialmente, por primera vez, en la embajada de Estados Unidos aquí en Jerusalén, la capital de Israel", declaró Ivanka ante los invitados en la nueva sede diplomática del barrio de Arnona, en la zona occidental.
El himno de Estados Unidos y el embajador de ese país ante Israel, David Friedman, dieron comienzo a la recepción, que comenzó a las 16.00 hora local (13.00 GMT), a la misma hora que se declarara el Estado de Israel hace hoy 70 años en Tel Aviv.
"Hoy abrimos la embajada de Estados Unidos en Jerusalén, Israel", dijo el diplomático frente al presidente israelí, Reuvén Rivlin; el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y la delegación estadounidense encabezada por el subsecretario de Estado, John Sullivan, y que incluye a Ivanka Trump, a su marido, Jared Kushner, y al secretario del Tesoro, Steve Mnuchin.
Estados Unidos se convirtió hoy en el primer país en tener su embajada ante Israel en Jerusalén desde 2006, después de que los países las retiraran gradualmente cuando la comunidad internacional lo pidió por la anexión israelí en 1980 de la parte ocupada palestina, no reconocida internacionalmente.
"Israel es una nación soberana con el derecho a determinar su propia capital", declaró el propio Donald Trump, quien quiso participar en la ceremonia mediante un mensaje por vídeo.
"Nuestra mayor esperanza es la paz, y EEUU está comprometido con la paz en Oriente Medio, y con respetar el 'statu quo' en Jerusalén", declaró Trump, e insistió en su apoyo a un acuerdo de paz duradero con los palestinos.
"Gracias Trump por tener el coraje de cumplir tus promesas", declaró el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, uno de los últimos en subir al escenario, decorado con grandes banderas estadounidense e israelí.
"Trasladar la embajada a Jerusalén es, ante todo, un reconocimiento de la realidad", pero también, "un paso para impulsar la paz en la ciudad, en la región y en todo el mundo", declaró el vicesecretario de Estado de EEUU, John Sullivan, convencido de que la embajada estadounidense es un "un tributo a la paz".
Cientos de personas se concentraron en las inmediaciones de la nueva embajada en dos manifestaciones separadas, una a favor y otra en contra de esta decisión histórica.
En Gaza, unas 40.000 personas se manifestaron en las fronteras contra la decisión, y se registraron incidentes violentos en los que murieron al menos 43 palestinos por fuego israelí y cerca de 2.000 resultaron heridos.
EFE