El piloto del avión de la aerolínea bangladesí que se estrelló en Nepal el año pasado aparentemente sufrió una "crisis emocional" causada por un alto nivel de estrés y que le llevó a cometer varios errores, causando la muerte de 51 personas, informó hoy a Efe uno de los investigadores del suceso.

"El estado mental junto con un elevado nivel de estrés podría haberle conducido a violar todos los procedimientos de vuelo, lo que eventualmente condujo a la catástrofe", sentenció Buddhi Sagar Lamichhane, el secretario de la comisión de investigación oficial, que presentó sus conclusiones al Gobierno nepalí el domingo.

El avión, un Bombardier Dash 8 que realizaba el trayecto de Dacca a Katmandú con 71 personas a bordo se estrelló el 12 de marzo del 2018 en la capital nepalí durante el aterrizaje. Veinte tripulantes sobrevivieron el accidente.

"El estrés le llevó a fumar dentro de la cabina durante el vuelo, lo que va claramente contra el procedimiento operativo estándar de la compañía", señaló Lamichhane.

Según la fuente, los investigadores concluyeron tras revisar las conversaciones registradas en la caja negra del aparato que el capitán, Abid Sultan, se mostró en varias ocasiones tenso, irritable y agresivo.

Parecía estar cansado por falta de sueño y durante la fase de aterrizaje cometió varios errores cruciales, como cuando aseguró que el tren de aterrizaje estaba desplegado minutos antes de tocar tierra cuando en realidad no era el caso, añadió el investigador.

"Nuestra investigación mostró que el piloto estaba emocionalmente transtornado a causa de un problema con una de sus compañeras de trabajo de la misma compañía, que cuestionó su reputación como instructor de pilotos", dijo.

El informe también destacó que el avión se dirigió momentáneamente hacia la torre de control del aeropuerto de Katmandú alarmando a los controladores aéreos, hasta tal punto que llegaron a agacharse por debajo de las mesas.

En las conversaciones que mantuvo en la cabina, el capitán parecía inseguro sobre su futuro y se había planteado dimitir de la compañía.

"La futura inseguridad financiera podría haber aumentado su estrés", según el informe.

Los investigadores nepalíes subrayaron el historial de salud mental de Sultan, que fue retirado de la fuerza aérea de Bangladesh a causa de una depresión pero obtuvo permiso para pilotar aviones civiles tras una evaluación médica en 2002.

La compañía aérea no revisó el historial médico del piloto y los sucesivos exámenes médicos no se centraron en su historial depresivo, lo que de acuerdo con los investigadores debería haber sido obligatorio.

El accidente fue el peor incidente aéreo desde 1992 en Nepal.

En julio de ese año 113 personas murieron a bordo de un Airbus A310-300 de la compañía tailandesa Thai Airways que se estrelló en el Himalaya cuando se encontraba realizando el aterrizaje en el aeropuerto de Katmandú.

EFE