Dos profesores turcos terminan huelga de hambre de 324 días contra purgas
Protestaban por su destitución por supuestamente estar vinculados al fallido golpe de Estado de 2016.
Dos profesores turcos, la académica Nuriye Gülmen y el maestro de colegio Semih Özakça, han puesto fin a una huelga de hambre de 324 días, emprendida para protestar contra su destitución durante las purgas de funcionarios supuestamente vinculados al fallido golpe de Estado de 2016.
Durante su huelga ambos profesores sólo han consumido agua con sal y azúcar, así como vitamina B1, afirma el diario Cumhurriyet
Gülmen y Ozakça fueron expulsados de sus puestos de trabajo mediante un decreto emitido al amparo del estado de emergencia vigente desde la asonada en julio de 2016.
Unos 130.000 funcionarios han sido destituidos por decreto desde el fallido golpe, normalmente bajo la acusación genérica de mantener vínculos con la cofradía del predicador exiliado Fethullah Gülen, al que Ankara acusa de haber instigado la asonada, aunque la medida se extendió luego a numerosos izquierdistas laicos.
Estas decisiones no se pueden recurrir por la vía judicial, por lo que los dos profesores iniciaron una sentada en una plaza de Ankara, que fue aglutinando a simpatizantes, y en marzo del año pasado iniciaron una huelga de hambre.
Fueron detenidos en mayo pasado y pasaron a prisión preventiva, hasta que Özakça fue absuelto en octubre, mientras que Gülmen fue condenada a seis años de cárcel pero a la vez puesta en libertad en diciembre pasado.
Un comité gubernamental encargado de revisar las destituciones de los funcionarios decidió ayer no restituir en sus trabajos a Gülmen y Ozakça.
Los dos profesores pusieron fin a su huelga de hambre, agradeciendo a sus simpatizantes en una rueda de prensa el apoyo recibido durante todos estos meses y explicando que su próximo paso sería recurrir a la Judicatura, señala el diario turco Cumhuriyet.
Dado que los tribunales turcos no pueden revisar las decisiones administrativos tomadas bajo el estado de emergencia, la única vía abierta para Gülmen y Özakça es el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
EFE