Cadena de muertes y contagios de Covid-19 en la Iglesia Ortodoxa Serbia
Hospitalizan a arzobispo que ofició misa de patriarca muerto por coronavirus, que a su vez celebró ceremonia de otro muerto por el virus.
El arzobispo David de la Iglesia Ortodoxa Serbia fue hospitalizado hoy con Covid-19, tras haber oficiado ayer en el funeral por el patriarca Irineo I, fallecido por esa enfermedad, en una ceremonia multitudinaria en la que muchos fieles besaron el cristal que cubría el féretro.
Irineo se había contagiado a su vez al dirigir el pasado día 1 la liturgia por Amfilohije, jefe de la Iglesia Ortodoxa Serbia para Montenegro, fallecido también por el nuevo coronavirus.
El funeral de Amfilohije atrajo la atención de los medios ya que miles de sacerdotes y fieles se congregaron durante horas en la iglesia central de Podgorica, la mayoría de ellos sin mascarillas.
Miles de personas comulgaron con una misma cuchara, según es la tradición, y muchos besaban las manos del difunto, expuesto en un féretro abierto.
A la ceremonia por Irineo I, celebrada ayer en Belgrado, asistieron miles de fieles y toda la cúpula eclesiástica, pero se respetaron más las medidas contra el Covid-19.
No obstante, muchos asistentes no llevaban mascarillas y besaron el vidrio que cubría el féretro y que de vez en cuando los sacerdotes limpiaban con trapos y desinfectantes.
Ayer murió también de Covid-19 el exarzobispo serbio Artemije, mientras se espera que logre recuperarse el arzobispo Joanikije, de la misma iglesia en Montenegro, que todavía está enfermo.
Una monja del monasterio serbio de Pec falleció de Covid-19, mientras 17 monjas y un sacerdote del monasterio de Zica están contagiados.
Serbia, de 7 millones de habitantes, registra hoy un récord de muertos por el Covid-19, 38, y un alto número de contagiados, 5.067 en las últimas 24 horas.
EFE