Parejas del mismo sexo desafían con su baile los prejuicios de la sociedad de Puerto Rico, una de las cunas de la salsa, derribando también los roles de este ritmo tropical que tradicionalmente ha marcado que el hombre dirija y la mujer, se deje guiar.
A sus 33 años, la profesora, pionera en enseñar a otras mujeres a liderar en el baile en Puerto Rico, rememora que cuando empezó a bailar dirigiendo a los llamados seguidores se sintió "observada" y se encontró "con todos esos cuestionamientos y todo ese posicionamiento de 'pero, ¿estás haciendo de varón?"
Hace tres años que la puertorriqueña Amalís M. Cintron comenzó a crear "un espacio" en el que sentirse cómoda bailando salsa asumiendo el rol de líder y, a través de su proyecto "Salsayternura", fomenta la danza inclusiva para desvincular el rol del género en el baile, según explica a EFE.
EFE