Los daños que deja el paso del huracán ‘Julia’ por San Andrés
Las islas de San Andrés y Providencia volvieron a vivir una verdadera situación de pánico, ante el paso del huracán ‘Julia.
En esta oportunidad los daños causados no fueron tan cuantiosos como los registrados por el huracán Iota en 2020.
No obstante, las autoridades emprendieron un plan de contingencia para atender a las familias afectadas incluyendo las ayudas humanitarias, mientras se realiza el censo definitivo de las afectaciones.
Dentro de este plan, fueron dispuestos los siguientes campos de refugio para atender a las familias afectadas: Camp, Flowers Hill, Bolivariano, Vive Digital y San Francisco.
Por su parte, en el más reciente reporte el Ideam precisó que el huracán ‘Julia’ ha perdido fuerza y ha sido reclasificado como tormenta tropical ‘Julia’ y continúa su desplazamiento hacia el occidente, con una velocidad cercana a los 24 km/h (13 nudos), vientos sostenidos de 115 km/h. Actualmente su centro se ubica a 355 Kms de distancia de la Isla de Providencia y 304 Kms de San Andrés, alejándose del archipiélago.
Se pronostica que el sistema mantenga su trayectoria hacia el occidente y que continúe como tormenta tropical en las próximas horas, disminuyendo paulatinamente su intensidad según los últimos análisis del Centro Nacional de Huracanes, (NHC, por sus siglas en inglés).
Aunque el sistema ahora está en la categoría de tormenta tropical continuando su paso por Nicaragua, el Centro Nacional de Huracanes, en conjunto con el Ideam, han acordado suspender las alertas por la tormenta tropical para el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, lo cual significa que ha disminuido la posibilidad de ocurrencia de rachas de viento aún cuando persista la probabilidad de precipitaciones asociadas a bandas externas del sistema y marejada ciclónica en el área del archipiélago.
Así mismo, se tomó la decisión de continuar con el nivel de aviso del sistema sobre el territorio nacional, a pesar de la mejora en las condiciones atmosféricas, toda vez que, persisten condiciones meteomarinas adversas, en concordancia con el protocolo nacional de huracanes.