La familia de Richard Montaño Pedrozo está dolida por su muerte. El hombre, de 31 años y de nacionalidad venezolana, se convirtió en la tercera víctima mortal del atentado sicarial que se presentó el pasado 24 de septiembre en una vivienda, ubicada en la carrera 31 con calle 33, barrio Vista Hermosa del municipio de Soledad.

“Richard le había dado posada a Jhonnard José Aldana Ferrer, el otro muerto. Se conocían desde Maracaibo porque ambos eran venezolanos. Le había dado posada porque estaba sin trabajo y lo estaba ayudando”, dijo un familiar.

El día del atentado, Richard, su hija de 5 años, Jhonnard y otra persona de nombre Jesús Miguel Blanco estaban sentados en la puerta de la casa cuando llegaron dos sicarios en moto y abrieron fuego de forma indiscriminada. 

Jhonnard murió ese mismo día tras ser llevado al Camino Simón Bolívar. Al día siguiente murió en un centro asistencial la hija de Richard y ayer lunes murió en el Hospital General de Barranquilla Richard. Jesús Miguel es el único herido. 

La familia precisó que Richard tenía un año residiendo en el Atlántico y solo hace un mes estaba su amigo Jhonnard viviendo con él. 

Richard se ganaba la vida polarizando carros y en Venezuela dejó dos hijos más.

Hay que recordar que la Policía Metropolitana de Barranquilla ha ofrecido una recompensa de hasta 5 millones de pesos para dar con el paradero de este triple crimen.