"El 25 de noviembre de 1960, las hermanas Mirabal fueron brutalmente asesinadas por ser mujeres y activistas. Su único crimen fue haber luchado por sus derechos contra el dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961). En 1993, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Resolución 48/104 para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que define este tipo de violencia como "todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada"".

Por lo que, en 1999, la Asamblea General proclamó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

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De acuerdo con un informe de la Defensoría del Pueblo, entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de 2025, en Colombia se han registrado 76 feminicidios, más de 11.000 casos de violencia contra las mujeres en el espacio familiar y 11.000 delitos sexuales contra mujeres.

Mientras que en el contexto regional, según la Organización Panamericana de la Salud, una de cada tres mujeres en las Américas ha sufrido violencia física o sexual a lo largo de su vida.

Cátedra Unesco Prevención de la Violencia contra la Mujer

En Barranquilla, la Universidad Simón Bolívar coordina la Cátedra Unesco Prevención de la Violencia contra la Mujer, un reconocimiento internacional de excelencia otorgado a universidades, centros e instituciones de educación superior que contribuyen activamente al cumplimiento de los propósitos de la Unesco a través de procesos educativos de alta calidad.

Selene Ariza, directora de la misma, destacó que tanto "la Universidad Simón Bolívar como las instituciones que hacen parte de la cátedra Unesco, que son a nivel iberoamericano, realizamos acciones de formación, sensibilización, de investigación y de incidencia en los espacios públicos, de articulación con el sector público, para lograr que no se siga perpetuando la violencia contra las mujeres, las niñas y las jóvenes en nuestro territorio".

Sin embargo, reconoce que trabajar el tema afronta un sinnúmero de desafíos, los cuales "radican mucho en todas esas construcciones sociales y culturales que hacen posible la persistencia de estas violencias, por supuesto atraviesan nuestras instituciones, el sector público, el Estado, las instituciones de educación superior, los contextos laborales. Entonces, muy posiblemente persistan factores en estos entornos que aún contribuyan a que esta violencia persista".

Aunque reconoce que, "el principal desafío es poder transformar la manera en cómo nos vinculamos, nos relacionamos y los lugares que han sido adjudicados a las mujeres en los distintos entornos".

Sobre las estrategias que utilizan y que resultan ser efectivas en la prevención de la violencia contra la mujer, Ariza explicó que lo más importante para la Cátedra Unesco, "es la centralidad de las víctimas en el proceso, en este caso la centralidad de las mujeres. Esta centralidad que implique la dignificación de la mujer. Es decir, que en ese acompañamiento, en esa atención, la relación que se establezca entre lo público, lo privado y las víctimas de la violencia de género, se logre considerar a esta sobreviviente como una ciudadana, que esté en el centro, el considerarla como sujeta de derecho y que esa relación no se establezca desde una perspectiva que le infantilice o desde una perspectiva asistencialista o desde una perspectiva que lastimosamente le revictimice".

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El papel de los hombres

Aunque la protagonista principal de esta cátedra es la mujer, Selene Ariza destacó la receptividad de los hombres en esta transformación social y cultural. "Podemos ver en las nuevas generaciones, al menos en el ámbito de la educación superior, cómo es igualitaria entre hombres y mujeres, entonces, en ese sentido, es un punto a favor". 

Aun así, y a pesar de que haya avances en este tema, las cifras de violencia contra los mujeres aumenta cada vez de manera más alarmante. La directora hizo un análisis sobre las barreras culturales y funcionales más profundas que esta problemática aborda.

"La impunidad es un factor desafortunado en relación a las violencias contra las mujeres, las niñas y las jóvenes, y desde las universidades pensamos que a través de la generación de nuevos conocimientos, de los trabajos en los territorios, uno pudiera ayudar a consolidar unas políticas públicas y unas acciones de las entidades encargadas de hacer acompañamiento a la violencia, a la vulneración de derechos, para lograr que esta impunidad no persista, y que se contribuya a tener una respuesta efectiva, una respuesta dignificante frente a estos casos de violencia", aseveró.

Finalmente, la experta subrayó la influencia de la polarización política, el conflicto armado y el factor económico en las cifras de violencia de género.

"Cuando se dan estas circunstancias económicas, de conflicto armado, de polarización política, quedan en el centro también los temas de género. Si analizamos el conflicto armado que aún persiste en varios territorios del país, daremos cuenta que estas violencias que se ejercen, no solamente tienen el sentido de tener un control sobre el territorio en términos de lo económico, sino también implica un control sobre las dinámicas sociales", indicó.

Agregó que, "en estos contextos, esto lo ha dicho la Comisión de la Verdad, el Centro Nacional de Memoria Histórica, ahora la Jurisdicción Especial para la Paz, las mujeres, las niñas y las jóvenes sufren unos riesgos de manera diferencial por esas construcciones de género, y hay unas violencias específicas derivadas solo por el hecho de ser mujer".

La cátedra también cuenta con el podcast Voces de Igualdad: este programa se desarrolla con el apoyo del Centro de Investigación e Innovación Social José Consuegra Higgins, Unisimón Radio Digital y el Departamento de Ciencias Sociales y Humanas, bajo el  liderazgo de Selene Ariza Ortiz.

En conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la cátedra organizó el tercer encuentro universitario de prevención de las violencias de género y promoción de la igualdad de género, el pasado 7 de noviembre en las instalaciones de la universidad.

En el evento participaron la Oficina de la Mujer de la Alcaldía Distrital, Bienestar Universitario, la Universidad del Magdalena como institución aliada de la cátedra, otras instituciones a nivel internacional, estudiantes, docentes y personal administrativo, los cuales abordaron distintas temáticas, prevención de la explotación y el abuso sexual, las rutas de atención dentro de las mismas universidades, el rol de los consultorios y las clínicas jurídicas en el acompañamiento a las violencias de género, la respuesta institucional por parte de la alcaldía distrital frente a casos de violencia de género.