Tras por lo menos 12 horas de intensa búsqueda, la Policía Metropolitana de Barranquilla dio con el paradero de la pequeña bebé de dos meses Shaday García Pacheco, que había sido raptada de los brazos de su madre, este miércoles en la mañana, en el barrio Normandía.

"Era imposible que la bebita no apareciera con todo el despliegue de la Policía Nacional (casi 2 mil hombres), el Gaula, la Sijín, todos los comandantes al frente del operativo y un helicóptero sobrevolando permanentemente", destacó el Alcalde de Soledad, Joao Herrera Iranzo.

Explicó que gracias a la información aportada por una cooperativa a la que está afiliado el motocarro con el cual se produjo el hecho, se dio con el paradero de sus seis propietarios. Fue precisamente el sexto, residente en el barrio Las Cometas, quien a su vez suministró la identidad del conductor, que se encuentra huyendo.

Con esa información se desplegó la denominada 'operación candado' que le fue cerrando el cerco a los autores del hecho, en los sectores de 'Las Villas'.

"Fue así como se recibió una llamada donde informaban que la bebita se encontraba abandonada, se dispuso el operativo y fue rescatada", agregó el mandatario.

Tras resaltar la labor de las autoridades, el Alcalde puntualizó: "En Soledad nada se pierde o lo que se pierde aparece". 

La menor fue encontrada abandonada en el sector de Manuela Beltrán por una ciudadana cuyo nombre no fue revelado por seguridad. “La niña, quien habría sido abandonada por sus captores, fue llevada por la señora a la estación de Policía de Soledad 2.000. De ahí fue remitida a la Clínica de la Policía; se encuentra en buen estado de salud”, manifestó Juliana Monterroza, secretaria de gobierno de Soledad.

El coronel Juan Carlos Nieto, comandante encargado de la Policía Metropolitana de Barranquilla, había ofrecido hasta 10 millones de pesos para quien diese información que permitiera capturar a los secuestradores de la pequeña de dos meses, Shaday García Pacheco. 

El indignante hecho había ocurrido diagonal a la iglesia del barrio cuando la madre la tenía en sus brazos.

Según la Policía, la mamá de la bebé se encontraba en un centro médico y allí habló con una desconocida con quien acordó tomar un motocarro puesto que, según conversaron entre ellas, iban hacia el mismo destino. Fue en ese trayecto en el que la abordaron con un arma taser y la amenazaron con entregar a la bebé. 

La mujer se subió al motocarro y se dio a la huida. Aparentemente a las pocas cuadras se bajó del vehículo para subirse a un taxi. Testigos indicaron que la mujer llevaba puesto un pantalón salmón.

Por fortuna la bebita ya se encuentra en casa.