Francisco Eladio Uribe Ochoa, un exmilitar colombiano que venía siendo procesado en la JEP por los llamados ‘falsos positivos’, fue expulsado de esa jurisdicción por aparecer entre los colombianos capturados en Haití vinculados al complot criminal que condujo al magnicidio del presidente de ese país Jovenel Moise.

Los magistrados de la Jurisdicción Especial para la Paz ordenaron trasladar el expediente de Uribe Ochoa a la justicia ordinaria, para que continúe su proceso allí.

Desde luego tendría primero que aclarar su situación jurídica en el país isleño, donde enfrenta graves cargos por el asesinato de Moïse ocurrido el 7 de julio de 2021, y por el que permanecen presos otros 17 militares colombianos retirados.

Para la expulsión de la JEP en el caso colombiano, se consideró que Uribe Ochoa incurrió en incumplimiento a los compromisos adquiridos, pues salió del país rumbo a Haití sin permiso o autorización alguna, pese a que la ley lo exige.

En la actualidad Francisco Eladio Uribe Ochoa se encuentra privado en una cárcel de Puerto Príncipe, la capital haitiana, esperando el inicio del juicio.

En Colombia el entonces militar fue vinculado a una investigación por el homicidio del campesino Luis Carlos Cárdenas, ocurrido en 2008.

El campesino fue retenido, torturado, asesinado y presentado como guerrillero abatido en combate en la vereda Chorros Blancos del municipio de Yarumal (Antioquia). Los hechos se presentaron en la operación ‘Ferrari’.

De acuerdo con la investigación, Cárdenas fue reclutado con una oferta de trabajo en una hacienda bananera.

Por estos hechos, la Fiscalía General acusó en 2018 a Uribe Ochoa, sin embargo nunca fue presentado ante un juez puesto que se sometió a la JEP indicando que los hechos por los que era procesado tenían relación con el conflicto armado.