Los hospitales del país se nutren en gran parte de los recursos que generan los juegos legales de suerte y azar, entre ellos el chance, que produce millonarios ingresos para atender entre otros a los pacientes de Covid-19.

Una pandemia, tan peligrosa como este virus, está rondando a esas finanzas del sector salud con la explosión descontrolada de juegos, rifas y sorteos que no pagan impuestos, se quedan con los premios y muchas veces se apoyan de las redes sociales para invitar a los incautos apostadores a que pierdan su dinero sin que le quede un peso a las arcas de los departamentos.

El abogado Jhony Mena, asesor jurídico de las empresas de juegos legales, sostiene que las cifras con las que se quedan las bandas criminales superan la escalofriante cifra del billón de pesos solo en lo que va corrido de este año  y que esta es gasolina para otros fenómenos delictivos.

“Los apostadores en especial del chance, uno de los juegos más populares del país, caen en las trampa por desconocimiento muchas veces y porque las bandas ponen señuelos para que ganen al principio pero pierdan todo al final”, dice Mena al explicar que el único antídoto contra esta “pandemia” es la cultura de la legalidad entre los ciudadanos.

El gerente de Edusuerte Pedro Fayad, la entidad de la Gobernación del Atlántico que vigila la legalidad de los juegos de suerte y azar en ese departamento, sostiene que las bandas crimínales están usando el termino “donación” en las boletas que le venden a los incautos.

“Cuando las personas donan no tienen ninguna posibilidad futura de reclamar”, sostiene Fayad al explicar esta modalidad utilizada por los delincuentes para defraudar a los incautos compradores de rifas de todo tipo que se promueven en los municipios .

Es por esta razón que la Policía Metropolitana en Barranquilla realizó en las últimas horas un operativo relámpago en varios barrios de la ciudad que dejó nueve personas capturadas que tenían en su poder centenares de talonarios de rifas clandestinas que prometían grandes premios y que al final defraudaban a los compradores .

En 150 operativos similares a este se ha capturado en los últimos días a 58 personas que han inundado de rifas y juegos clandestinos a la región lo que demuestra que la cuarentena se convirtió en un espacio propicio para  las redes de delincuentes para activar sus operaciones ilícitas mientras estuvo, por razones de bioseguridad, detenido el juego del chance legal para evitar la propagación del Covid-19

Mena afirma que esta es otra pandemia tan peligrosa como la del coronavirus donde evitar el contagio también depende de la comunidad a través de la cultura de la legalidad .