"No era lavador de carros, él trabajaba como taxista", aseguraron esta mañana los familiares de Camilo Viloria Agamez en las afueras de Medicina Legal en Barranquilla.

Sobre el hecho se conoció que Camilo Viloria había cogido el taxi que le habían entregado para lavarlo, pero esta versión fue desmentida por los familiares quienes manifestaron que el hombre de 34 años llevaba varios años ejerciendo el oficio de taxista.

Uno de sus cinco hermanos contó que su hermano salió a trabajar a las 9 de la noche en el taxi del que le hacía el relevo al conductor.

"El carro estaba de pico y placa, por eso salió a las 9 de la noche a trabajar. Siempre le hacía el relevo al conductor del taxi", manifestó.

A las 11 de la noche fue asesinado por tres delincuentes que se hicieron pasar como pasajeros y con un arma blanca lo apuñalaron para robarle sus pertenencias.

"A las 2 de la madrugada nos avisaron que lo habían matado. Estaba en la clínica Adela de Char con varias heridas en su cuerpo provocada con arma blanca", dijo su hermano.

La víctima residía en el barrio Manuela Beltrán con sus padres. Era el menor de seis hermanos, era soltero y no dejó hijos.