En la logística de las importaciones y exportaciones, los transportadores de carga y los auxiliares logísticos o coteros son quienes más padecen las consecuencia de las permanentes crisis portuarias en Barranquilla.

Cuando no hay carga, no hay trabajo y si no hay trabajo, no hay para comer.

En el caso de los coteros no tienen un salario fijo y los centenares que permanecen en los parqueaderos vecinos del Puerto de Barranquilla, están regresando a sus casas con los bolsillos “pelaos”.

El transporte de carga está paralizado en Barranquilla por el cierre portuario, consecuencia del bajo calado por la alta sedimentación, y ahora esperan que los trabajos de dragado que se iniciaron esta tarde, permitan el ingreso de carga. 

Jhon Jairo Pedroza, auxiliar logístico, dijo que son muchas las familias “que estamos sufriendo por la falta de trabajo aquí en la zona portuaria”.  

“Al Puerto, no están entrando barcos. Los barcos se están devolviendo, para Cartagena, para Santa Marta. El trabajo que nosotros hacemos no está entrando. Y por eso estamos sufriendo. No están entrando mulas para nosotros trabajar", dijo.

Por su parte, Armando Giraldo, otro auxiliar logístico, habló de los perjuicios para ellos. "No estamos trabajando como antes. Nos está afectando a todos los que trabajamos acá en el parqueadero", señaló.

Jhon Jairo y Armando son dos de los más de 70 coteros que están día a día en el parqueadero conocido como ‘La perrera’.

Allí en promedio llegan unas 150 tractomulas y este miércoles cuando Zona Cero visitó el lugar apenas estaban parqueadas unas 20. Estas regresarán vacías, como en los últimos 6 días, cuando no ha ingresado carga al Puerto de Barranquilla.

Héctor Mauricio Reyes, presidente de la Agencia Nacional de Transportadores, sostuvo que en el negocio del movimiento de carga "uno espera devolverse con el flete para otras ciudades, pero si llegamos aquí, el Puerto sigue así sin despacho, las pérdidas son muchas, el peaje, el combustible, el tiempo”. 

Señaló que como están las cosas, “el transportador no va a querer venir a Barranquilla. Nos va a tocar desplazarnos a Cartagena, Santa Marta y otras ciudades con destino al exterior".

"Mire los parqueaderos totalmente vacíos, la gente que depende de la logística, del descargue, del lavado, de la descarpadas comienza ya hoy desde el sexto día a ser afectadas", se lamentó el transportador.