Un contundente rechazo ha generado la decisión del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane) de excluir la recolección de información de las personas con discapacidad en el Censo de Población y Vivienda 2018.

Según el Director del Dane, Mauricio Perfetti, la decisión obedece a razones presupuestales, pese a que la obtención de la información básica sobre personas en condición de discapacidad fue acordada en 2015 con el Consejo Nacional de Discapacidad.

En este sentido, Perfetti le dirigió una comunicación al Ministro de Salud, Alejandro Gaviria, “para que de ser posible, el Ministerio a su cargo pudiera contribuir con recursos presupuestales que permitan al Dane poder incorporar al menos las preguntas para una caracterización adecuada de la diversidad funcional (discapacidad)”, argumentando “las restricciones fiscales y por tanto presupuestales del momento lo que limita a hacer un censo básico y austero, según precisos lineamientos del Confis”.

En esa misiva, el Director del Dane señala que solo se podrán hacer 50 preguntas sobre características básicas de la población, hogares, viviendas, información con enfoque diferencial étnico, las proyecciones de la población y las necesidades básicas insatisfechas, por lo cual, no se podrá recolectar la información sobre población en condición de discapacidad y la información básica para calcular un índice de pobreza multidimensional.

La situación ha generado un movimiento de rechazo a través de las redes sociales, especialmente Twitter, donde ha marcado tendencia el hashtag #ElCensoEsDeTodos.

“Las personas con discapacidad deben ser contadas en el nuevo censo, para que sus necesidades sean una prioridad del estado en la próxima década”, dice uno de los comentarios.

Con ello, “las personas con discapacidad quedarían condenadas a la invisibilidad”.

“Excluir preguntas sobre las personas con discapacidad en el Censo 2018 es un acto discriminatorio e impide tener datos confiables para la formulación de políticas públicas para esa población. Las preguntas estaban listas y las quitaron por razones presupuestales”, señaló por su parte Mauricio Albarracín, abogado investigador del Centro de Estudios de Derecho, Justicia y Sociedad.

De acuerdo con este movimiento, la situación afectaría a más de 3 millones de colombianos con discapacidad, según las cifras proyectadas del censo 2005.

De estas personas, el 43,2% con problemas de visión; 29,5% de movilidad; 17,4% de audición; 12,3% intelectual; 9,8% mental.

“Excluir a las personas con discapacidad nos demuestra  que somos un país excluyente e intolerante a las diversas circunstancias, capacidades y diferencias que existen entre nosotros los colombianos”, comentó @daniherrera_15.

“En este país, el enfermo mental es el de la brillante idea de eliminar preguntas sobre discapacidad en el censo. Van a dejar a casi 4 millones de personas por fuera; como si no existieran”, indicó, por su parte, Santiago Alzate @RoloAlzate