El Procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado, aseguró que el “blindaje” jurídico a los acuerdos de La Habana, defraudan la Constitución y el ordenamiento jurídico.

El jefe del Ministerio Público hizo la afirmación durante su intervención en la audiencia pública de la Cámara de Representantes frente al proyecto de Acto Legislativo ante un eventual acuerdo final entre Gobierno y las FARC.

“Esta mañana estuve escuchando la intervención del señor Presidente y del doctor Sergio Jaramillo. ¡Perdieron la vergüenza…perdieron la vergüenza! El Presidente, palabras más palabras menos lo que dijo fue que la refrendación era una concesión graciosa, que podría existir o no y que esa concesión graciosa lograría consolidarse si la Corte se lo permitía, pero no, como es una concesión graciosa también entrarían en rigor los acuerdos. Y el plenipotenciario Sergio Jaramillo fue aun más claro diciendo que esta es la conclusión o cierre del proceso Constituyente del 91”, manifestó el Procurador.

Sostuvo que “esta estrategia del blindaje jurídico con los acuerdos especiales, el bloque constitucional y con el marco de referencia es o se hace simplemente para defraudar la Constitución y se defrauda primero en el Congreso, para que se despoje de la facultad constituyente”.

Anotó que “nadie en Colombia es adverso a la paz, todos a una coincidimos en ese anhelo, hacemos el esfuerzo para que se cumpla ese anhelo. En Colombia no hay una sola familia que no haya sufrido los rigores de la violencia”.

Sin embargo, precisó, “para conseguir la paz el Gobierno, en cabeza de su Presidente, no puede desbordar sus competencias, “pero, fundamentalmente, en una de esas limitaciones está la de no alterar la distribución de competencias de los diferentes órganos del Estado”.

Y puntualizó: “El acuerdo especial no es especial, no se le puede dar la connotación ni la naturaleza de acuerdo especial, no puede ingresar al bloque de constitucionalidad y por ende no puede convertirse en marco de referencia para los controles constitucionales de los actos legislativos y las leyes que se expidan. ¿Y eso para qué se hace? Para defraudar la Constitución, el ordenamiento jurídico”.