Obreros en pleno trabajo de desmonte en el Aquarela. En la otra foto, el alcalde de Cartagena, Dumek Turbay
Obreros en pleno trabajo de desmonte en el Aquarela. En la otra foto, el alcalde de Cartagena, Dumek Turbay
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Por el piso 25 comenzó el desmonte ‘piso a piso’ del edificio Aquarela

Costará $11.000 millones y tardará seis meses.

El alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, dio este viernes el primer ‘monazo’ de la primera fase del desmonte ‘paso a paso’ del polémico edificio Aquarela construido a pocos metros del Castillo San Felipe, en pleno Centro Histórico.

La estructura mantuvo en vilo la declaratoria de la ciudad como Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por parte de la Unesco.

El mandatario llegó al sector en compañía de los representantes e ingenieros de la firma Atila, que tienen a su cargo los trabajos para dar el primer 'monazo'.

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El mandatario reiteró que el desmonte será “piso por piso”, por etapas, con el objetivo de salvaguardar el patrimonio histórico y cultural de la humanidad. “Estamos dando así inicio a la materialización definitiva del procedimiento técnico para derribar dicha estructura”.

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Nelson Chiquizá, ingeniero de Atila, señaló que van a empezar el proceso con la colocación de diferentes elementos de protección que "nos permita tener mayor control con el personal que estará a cargo y con los vecinos del sector".

Vale aclarar que en este desmonte no se utilizarán explosivos, sino que se utilizarán diferentes elementos que ayuden a tener una mejor ejecución.

El alcalde Dumek Turbay junto a representantes de la firma Atila, a cargo del desmonte del Aquarela

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"Inicialmente, cinco pisos serán desmontados manualmente por un proceso de demolición neumática debido al deterioro que tienen esos niveles. Posterior a ellos se hace un desmontaje con técnicas de corte en diamante y uso de equipos de elevación de cargas elemento a elemento, sección de muro a muro, sección de placa", explicó.

El proceso técnico, que costará $11 mil millones y tardará seis meses, consistirá en un método innovador, eficiente y sostenible que preserve el medioambiente y no afecte viviendas cercanas, especialmente, que no haya ningún riesgo estructural para el Castillo San Felipe, dijo a su vez el mandatario cartagenero.