En medio de un recorrido por el mercado público, aislado para vendedores ambulantes, el Alcalde de Bárranquilla, Jaime Pumarejo, advirtió a los infractores del toque de queda, ley seca y pico y cédula que "pasarán un mal rato" cuando sean sorprendidos por las autoridades en la calle sin tener una autorización.

La primera medida, de carácter administrativo señala que "a quien encontremos en flagrancia, que se demuestre que está actuando con dolo, sabe que está poniendo personas en riesgo, lo vamos a conducir a la UCJ y podemos retenerlo hasta por 24 horas. Pasará un mal rato".

Agregó que "si encontramos personas que estén deliberadamente poniéndonos en peligro, violando el toque de queda e incentivando las aglomeraciones, a esa persona la Fiscalía le abrirá un proceso penal, se le investigará y lo llevaremos ante la justicia".

"Si bien hay personas que desacatan la medida, por necesidad o por falta de conocimiento, con él no nos vamos a meter", aclaró.

Son embargo, lanzó una advertencia pues "hay pocos que reiteradamente hacen fiesta".

Señaló que "se sabe en el departamento del Atlántico, en un municipio del área metropolitana, que una familia ha hecho 12 fiestas durante los últimos días". "A ellos le va a llegar la Policía y con todo el peso de la ley porque esas personas están poniendo en peligro a todos los vecinos".

El alcalde recorrió hoy el mercado público de Barranquilla, aislado por las autoridades para evitar el ingreso de vendedores ambulantes.