La Oficina de la ONU para los derechos humanos en Colombia alertó este miércoles de una grave situación humanitaria en la región del Macizo, en el departamento del Cauca, debido a enfrentamientos entre dos grupos armados ilegales que han dejado muertos, heridos y comunidades confinadas.

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"Desde el 30 de junio, en La Carbonera, municipio de Bolívar (Cauca), se presentan combates entre dos grupos armados no estatales. La población quedó en medio del fuego cruzado y, en este contexto, dos habitantes fueron asesinados, y otro más quedó herido", denunció el organismo en X.

La agencia denunció que estudiantes del colegio local quedaron atrapados en los enfrentamientos y que gran parte de la población permanece confinada, ante el temor de que los combates se extiendan a otros municipios de la región y deriven en "una grave crisis de derechos humanos".

"Alertamos sobre la grave situación que se está presentando desde ayer en la región del Macizo que provoca graves vulneraciones de derechos a la población, y que si escala aún más, podría conllevar a una crisis de derechos humanos", indicó la ONU.

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La entidad hizo un llamado urgente al Gobierno a adoptar "medidas efectivas e inmediatas" que prevengan una escalada del conflicto armado y protejan a la población civil.

Además, reiteró a los grupos armados su obligación de respetar el Derecho Internacional Humanitario (DIH) y abstenerse de acciones que pongan en riesgo a la comunidad.

1/Alertamos sobre la grave situación que se está presentando desde ayer en la región del Macizo #Cauca que provoca graves vulneraciones de derechos a la población, y que si escala aún más, podría conllevar a una grave crisis de #DDHH @DefensoriaCol @ONUHumanRights @petrogustavo

— ONU Derechos Humanos Colombia (@ONUHumanRights) July 2, 2025

El Cauca es uno de los departamentos más afectados por el conflicto armado en Colombia, donde confluyen disidencias de las extintas FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y otros grupos ilegales que se disputan el control territorial y las economías ilícitas.

Solo el mes pasado se perpetraron más de 20 atentados con explosivos atribuidos a las disidencias de las FARC, que mantienen una fuerte presencia en la región y ejercen presión sobre las comunidades rurales y líderes sociales.

EFE